La zona del ábside de San Martín ofrece un recorrido por Cuéllar a través del esgrafiado

Cuéllar

En la noche de ayer el grupo de trabajo dirigido por el segoviano Pablo Arévalo terminó los trabajos que durante tres fines de semana han realizado en los muros de la urbanización Altos del Palacio, detrás del Abside de la iglesia de San Martín. Seis litografías que plasman distintas imágenes de Cuéllar entre las que se encuentran la iglesia de San Miguel y un rincón de la Plaza Mayor que refleja la arquitectura tradicional castellana, el arco de San Martín, una parte de la muralla, el castillo de los Duques de Alburquerque, unas escaleras que desde el parque de la Huerta del Duque llevan al Castillo y una fotografía de los encierros de Cuéllar en la bajada de El Embudo.

Arévalo se ha mostrado más que satisfecho con el trabajo conseguido y muy agradecido a la decena de alumnos y profesores que le han acompañado en esta aventura cada fin de semana. El resultado final a su juicio es magnífico pero prefiere que sean los demás quien lo juzguen. No han faltado curiosos y turistas que se han acercado por la zona para admirar el trabajo realizado y que ha servido para en muchos casos dar a conocer qué es el esgrafiado segoviano. Cada una de las imágenes que han realizado mediante esta técnica está enmarcada en una serie de marcos con figuras geométricas de distintos tipos del esgrafiado tradicional.

El conjunto en sí llama la atención no solo por el resultado final sino que invita a quien lo observa a fijarse con detalle y a adentrarse en la representación. El volumen de los conjuntos y el realismo de los mismos es destacado. Entre las litografías que más dificultad le han supuesto a Arévalo y su grupo, se encuentran las últimas realizadas este mismo fin de semana. Se trata de una imagen del castillo visto desde unas escaleras en el parque de la Huerta del Duque, y de una imágen fotográfica de los encierros de Cuéllar. Esta última ha resultado más complicada al querer reflejar sobre la pared el movimiento de los animales, un aspecto que finalmente se ha conseguido y que ahora supone un recurso más dentro del atractivo turístico del entorno.