A huir de la quema

Zaragoza

A lo largo de la semana tanto el director deportivo como algunos futbolistas han afirmado que el Zaragoza no pasará apuros, no terminará entrando en la lotería del descenso. Tienen una buena oportunidad de ratificar estos augurios con la visita del Córdoba al estadio municipal porque los andaluces están metidos de lleno en la zona roja y una victoria zaragocista abriría una distancia de 11 puntos, sería hundir a un rival directo casi de forma definitiva.

El Real Zaragoza está obligado a resarcirse del mal partido jugado en Granada y recuperar la imagen que ha ofrecido en los dos partidos disputados en casa en lo que llevamos de 2018. Los choques ante el Barcelona B y Tenerife dieron luz al fútbol que apuntó a principios de temporada, se recuperaron sensaciones, que además se convirtieron en 4 puntos de 6. Por La Romareda pasan las opciones del equipo de Natxo González.

Vuelve Borja Iglesias, tras perderse por sanción el último encuentro, pero el entrenador cuneta con la baja de Guti. El canterano ya no pudo jugar en Granada y se ha convertido en una futbolista esencial en la medular. Su sustituto no está claro, como en Los Cármenes, podría ser Zapater, a pesar de que el capitán arrastra unas molestias en la espalda, aunque Natxo González podría retrasar la posición de Febas. La otra duda del la alinecióna está en el lateral derecho, donde el golpe recibido por Alberto Benito en el último partido podría abrir las puertas de la titularidad a Julián Delmás.

Una final para los cordobeses

El equipo andaluz llega con la obligación de ganar, su permanencia pasa por hacer un asegunda vuelta con números de ascenso. El club acaba de cambiar de manos con la llegada de Jesús León a la presidencia y del zaragozano de adopción, Luis Oliver, a la dirección general deportiva. En medio del mercado invernal, que termina el 31 de este mes, la plantilla franjiverde se encuentra en plena transformación.