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Los acusados de golpear y robar a un hombre en Reinosa dicen que solo le pidieron vino

El Ministerio Fiscal pide seis años de prisión para los acusados por un delito de detención ilegal, otro de robo con violencia y una falta de lesiones

Europa Press

Santander

Los dos acusados de entrar en la casa de un vecino de Reinosa, golpearle y robarle, además de llevarle, bajo amenazas, a dos cajeros para que sacase dinero, niegan haberlo hecho y afirman que fueron a la vivienda a pedirle vino y que fue él quien propuso ir al banco para prestarles lo que tuviese.

Ambos se han manifestado en este sentido durante el juicio que ha tenido lugar este martes en la Audiencia de Cantabria y que se ha suspendido por la ausencia de un testigo que se encontraba en el inmueble cuando supuestamente se produjeron los hechos y que no ha acudido a declarar.

La vista se retomará el martes 23 de febrero, a partir de las 10.00 horas.

"Era un hombre que era alcohólico, estaba borracho todo el día", ha opinado sobre la víctima, que falleció en octubre, uno de los dos acusados, para los que el Ministerio Fiscal pide seis años de prisión por un delito de detención ilegal, otro de robo con violencia y una falta de lesiones.

Según el escrito provisional de la Fiscalía, el 19 de mayo de 2015 los dos encausados se dirigieron a la vivienda del hombre de 65 años, dieron fuertes golpes a la puerta y consiguieron que les abriese amenazándole de muerte.

Una vez en el interior, explica, le condujeron "a empujones" hasta la cocina, cogieron un cuchillo y lo esgrimieron contra él, propinándole, además, diversos golpes y exigiéndole que les entregase el dinero que tuviese.

Después de robar distintos objetos de la casa, presuntamente le obligaron a acompañarles a dos cajeros de entidades bancarias para sacar dinero, aunque no pudieron obtener ninguna cantidad por falta de saldo.

Posteriormente, según el fiscal, volvieron al domicilio de la víctima, donde continuaron propinándole puñetazos y golpes en el abdomen.

Los dos acusados, que son primos y han negado haber cometido los delitos que se les imputan, han afirmado que ese día estaban "de fiesta" con más familiares.

Así, cuando ese día se les acabó la bebida, ha señalado, pensó que él tendría vino, por lo que decidió dirigirse con su primo a la vivienda, donde estuvieron "charlando como amigos".

Como no tenía vino, le preguntaron si podía prestarles 20 euros, de los que tampoco disponía.

"Yo no le obligué a nada, si era amigo mío", ha añadido el acusado, que ha subrayado que fue la víctima quién sugirió ir al cajero, ya que "posiblemente" contaría con algo de dinero en la cuenta.

Sobre las razones por las que el fallecido interpuso la denuncia, ha comentado que "en algunas de las fiestas" que estuvo con su familia "se pasaba con el alcohol" o "voceaba" y le decían que se fuese a casa, lo que le podría haber molestado.

Uno de los agentes de la Policía Local que se trasladó al domicilio ha explicado que recibieron la llamada de ese testigo sobre las 3.00 horas, y que, cuando llegaron, se encontraron en el portal con los dos acusados, uno de ellos con un hacha que, según dijeron, les había dado la víctima porque la tenía "muerta de risa".

En la vista se han leído las distintas declaraciones que hizo éste antes de fallecer, en las que aseguraba que dos años antes de los hechos juzgados uno de los acusados ya había accedido a su vivienda rompiéndole la puerta, que seguía rota, y le había robado 300 euros.

 

 
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