La Autónoma de Madrid aumenta el control sobre las asociaciones de estudiantes
La universidad quiere obligar a las asociaciones de estudiantes a inscribirse en el registro de la Comunidad para poder utilizar, entre otras cosas, los espacios del campus o pegar carteles. Los estudiantes creen que les imponen una mordaza tras el boicot a un acto de González y Cebrián
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Agencias
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Madrid
Será obligatorio inscribirse en el registro de asociaciones de la Comunidad de Madrid para poder constituir una asociación de estudiantes en la Autónoma de Madrid. Solo aquellas asociaciones que estén registradas y tengan luz verde del rector podrán utilizar espacios de la universidad, pegar carteles o recibir subvenciones. Algo que hasta ahora no ocurría. Así figura en el borrador del nuevo reglamento de asociaciones que ha elaborado la Universidad pero que, según la vicerrectora de estudiantes, Ángela Barrios, todavía no está totalmente cerrado. "No hay nada decidido aún", explica Barrios, "lo que se pide es tratar de ver si a ellos les parece bien que se registren de manera estatal y autonómica como ocurre en la mayoría de las universidades". La Universidad, asegura Barrios, está abierta a varias posibilidades si el nuevo reglamento encuentra algún tipo de rechazo.
Los estudiantes no las tienen todas consigo. Una veintena de asociaciones se han unido contra estos cambios porque creen que la universidad les está amordanzado. "Creemos que pretenden acallar las voces críticas de los estudiantes y solo permitir que aquellas con ideas similares a rectorado sean las que se oigan", explica Pedro, uno de los estudiantes que se han sumado al movimiento UAM-Mordaza en contra de estos cambios. "No eran necesarios", asegura, "las asociaciones han estado funcionando bien, no han causado desperfectos". Estos estudiantes acusan a la Autonóma de vulnerar la libertad de expresión y de restringir el derecho a la libertad de asociación. Vinculan los cambios a los recientes altercados en la Facultad de Derecho cuando un grupo de estudiantes boicoteó una conferencia de Felipe González y Juan Luis Cebrián.
Según el borrador del nuevo reglamento, la solicitud de inscripción se realizará en el registro general de la Universidad, mediante resolución del rector, previo informe favorable del Decanato correspondiente, si así lo piden al menos quince estudiantes de la Universidad y aportan la acreditación de la inscripción en el registro de asociaciones de la Comunidad de Madrid. Las subvenciones de la Universidad se limitarán a una convocatoria anual para cubrir gastos de actividades dirigidas a la comunidad universitaria con la obligación de presentar la actualización de datos del registros y una memoria de actividades del año anterior. "No se podrán subvencionar", asegura el texto, "actividades de campaña electoral, de publicidad y protocolarias de las asociaciones, competiciones deportivas, viajes turísticos o de fin de curso".
Tal cual está redactado en el borrador, el nuevo reglamento permitirá retirar pancartas, murales o carteles que estén firmados por colectivos "no reconocidos por la Universidad, o que se ubiquen en espacios no habilitados, hagan referencia a hechos ya caducados o se expresen en un lenguaje grosero u ofensivo". Como novedad, incluye entre las causas para cancelar una asociación, el incumplimiento del "deber de actualización de datos o se vulneran los princpios democráticos en su funcionamiento o actividades realizadas o en las que hayan participado".
Los estudiantes aseguran que habrá poco margen para negociar con la universidad que quiere aprobar los cambios en enero.