Un juez sienta en el banquillo a cuatro acusados de trata de seres humanos

Sevilla

El juez de instrucción número 9 de Sevilla, Juan Jesús García, sienta en el banquillo a cuatro rumanos por trata de seres humanos con el fin de realizar actividades delictivas, con el fin de que robaran. Es el primer juicio que se celebrará en España por este supuesto contemplado en el Código Penal desde enero de 2015. El fiscal pide para dos de los acusados ocho años de cárcel, para cada uno. Y para los otros dos, seis años. La víctima es un testigo protegido que estaba obligado a robar una media de 10 catalizadores de coches cada noche.

El catalizador es una pieza que está situada al final del tubo de escape y contiene platino, un metal precioso. Su precio oscila entre los 500 y los 600 euros, aunque en algunos modelos pueden llegar a los 1.000 euros. Por un solo gramo de platino, según la Policía, se pagan unos 37 euros, y por el de paladio unos 30.

La red de trata, que se sentará en el banquillo en Sevilla, captó al testigo protegido en Rumanía. Le prometió que iba a trabajar en España en la construcción y que iba a ganar 1.200 euros al mes. Pero cuando llegó a Madrid, después de pagarse el viaje, le contaron que tenía que robar y lo amenazaron con hacerle daño a él y a su familia en Rumanía si se negaba. Lo tenían constantemente vigilado y le racionaban la comida.

Así fue como durante casi un año, explica el fiscal en su escrito de acusación, lo trasladaron a varias ciudades españolas, como Sevilla, Bilbao, Málaga o Barcelona, para robar los catalizadores. Si se oponía lo golpeaban con dureza. En cada lugar se quedaban varios días, en los que dormían en un coche. Cuando la policía desarticuló al grupo descifró 800 hurtos de catalizadores de vehículos.

La Fiscalía también pide que entre los cuatro indemnicen con cuatro mil euros a esta víctima de la trata con fines delictivos.

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