Susana Díaz nos queda muy lejos
No sé si les pasa, pero yo leo una información sobre Susana Díaz y tengo que comprobar que va en las páginas de información nacional. Su discurso me suena extraño.

'La línea roja de Matías Vallés' (01/12/16)
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Palma de Mallorca
No sé si les pasa, pero yo leo una información sobre Susana Díaz y tengo que comprobar que va en las páginas de información nacional. Su discurso me suena extraño.
Dicho de otra forma, no imagino a Susana Díaz haciendo campaña en Balears, abrazada a Francina Armengol en un mitin.
No discuto el impacto que pueda tener Susana Díaz en Andalucía, solo constato que esa influencia se amortigua conforme nos alejamos de esa comunidad, y nos alcanza muy debilitada.
Lo mismo sucede con Esperanza Aguirre. Tiene una portada en Madrid cada vez que estornuda, pero eso no significa que vayan a votarla en Valencia.
Pero volvamos a la presidenta andaluza, que en Balears no es un fenómeno paranormal porque ya tuvimos una Susana Díaz.
Se llamaba Margarita Nájera, militaba en el PSOE pero se presentaba con su nombre sin siglas a las elecciones de Calvià que siempre ganaba. Combinó el socialismo con el cemento.
Nunca sabremos qué hubiera sucedido con Nájera de haberse presentado al Govern. Sí sabemos que es una mujer inteligente, por marcar más diferencias con Díaz.
Supongo que este artículo se entenderá como un respaldo a Pedro Sánchez. No exactamente, pero Sánchez por lo menos veraneó repetidamente en Mallorca, que es lo máximo que históricamente podemos reclamarle a un gobernante español.