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Luís Alberto del Castillo

‘Las preocupaciones de un presidente’

En qué cabeza humana entra que se va a fabricar, por más conocimientos que se tengan de la construcción, una frontera, un muro artificial que aisle México de Estados Unidos

Firma Luís Alberto del Castillo, 'Las preocupaciones de un presidente'

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Algeciras

Erase una vez un país con un Presidente Saliente, que aprovechaba sus últimos días de gobierno para recomendar a sus aliados al Presidente Electo. Primero fue una visita a Europa. Allí se encontró con los lideres de Alemania, Francia, Inglaterra, ( la del Brexit ) y España. Habló con ellos , comió con ellos, tuvo una reunión cósmica con ellos. Y trató de decirles a todos y cada uno de ellos, que tuvieran paciencia con él y esperasen a ver su actuación como Presidente, Pues no es lo mismo ”Hacer y decir cosas durante la campaña electoral, que gobernar desde el Despacho Oval.”

En qué cabeza humana entra que se va a fabricar, por más conocimientos que se tengan de la construcción, una frontera, un muro artificial que aisle México de Estados Unidos y que encima la factura de kilómetros y kilómetros la va a pagar el pueblo mejicano. ¡Vamos anda ya!

Cómo se puede estar en contra de la OTAN y decir que el gasto de defender a Europa del peligro ruso es un gasto innecesario y decirle a los ukranianos que la guerra de Crimea ha sido una broma y que el erario público americano no puede aguantar más. Luego los paises asiáticos, otros locos con el comercio global…No. No podrá seguir inmerso en este ir y venir…Y el gasto para evitar el deterioro del clima mundial.

Después, tras una hora de conversación en la Casa Blanca con Obama, va y dice que el “care Obama”, la seguridad social que protege a casi 50 millomes de americanos está bien y que lo va a mantener. Y así , tantas y tantas cosas que dijo que iba a acabar con ellas si ganaba las elecciones.

Y todo es recibir a mandatarios extranjeros en su torre. Al paso que va no quedará ninguna entrevista para cuando jure el cargo y se tenga que trasladar a Washington. En fin parece que con este batiburrillo de presidentes salientes y entrantes, algo queda claro: habrá que tener paciencia y esperar a enero, a la toma de posesión de Trump y pedir a Dios de acuerdo con el expresidente uruguayo, Mújica, ¡Socorro!

 
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