Un americano tricantino ante las elecciones en EEUU
Hoy queremos conocer cómo un norteamericano vecino de Tres Cantos vive con emoción unas elecciones que pueden cambiar la historia

Estados Unidos se debate entre el republicano Donald Trump y la demócrata Hillay Clinton / SER Madrid Norte

Tres Cantos
Todos los ojos están puestos en Estados Unidos. Las elecciones presidenciales protagonizan la jornada, especialmente entre los norteamericanos que residen en nuestro país. Es el caso de Tim Westergren, vecino de Tres Cantos desde hace más de una década, que no ha votado entre Donald Trump o Hillary Clinton como futuros habitantes de la Casa Blanca, pero que sigue con el aliento contenido el resultado en las urnas como ha señalado en SER Madrid Norte.
Tim Westergren, norteamericano tricantino, sobre las elecciones en EEUU
00:30
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Sin embargo, tiene muy claro que la mejor opción no es Trump, al que considera un candidato bribón, charlatán y nefasto que ha podido financiarse una campaña y venderse desde el argumento del miedo. Miedo a los inmigrantes, a una futura presidenta, a los cambios e, incluso, al fin de la república. Aunque de decantarse las urnas por él, el candidato republicano no podría hacer todo lo que quisiera porque estaría controlado por el Senado y las instituciones democráticas, que sostienen un sistema de equilibrio.
Por otra parte, Clinton es la alternativa demócrata. Una veterana en política, esposa de un ex presidente que ofrece continuidad a la era de cambios iniciada por el primer presidente de color: Obama. A pesar de unos sondeos muy reñidos, cuenta con el apoyo masivo del voto latino para convertirse en la primera presidenta.
Una campaña electoral que durante 18 meses se ha convertido en un hastío para los nortemericanos, según Tim, donde se han superado todos los límites del insulto y las necedades, rompiéndose las reglas del juego limpio. Una campaña tan mediatizada que ha dividido la opinión incluso en el seno de las familias, aunque lo bueno es que hoy acaba. En cualquier caso, se escribirá una nueva página en la historia.