"La prostitución es la esclavitud del siglo XXI"
Dos testimonios le ponen voz al drama de la prostitución en Palma

'La prostitución es la esclavitud del siglo XXI'
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Palma de Mallorca
La Red de Atención a la Prostitución atendió a 2.000 personas en Palma en 2014. El 95 por ciento son mujeres.
Dos mujeres, dos historias le ponen voz a estas cifras. Alina hace tres años que dejó la prostitución. Hoy colabora con Médicos del Mundo Baleares para atender a las mujeres que todavía la practican. Gladis, lleva 9 meses ejerciendo la prostitución.
Alina:" Me inventé un personaje para soportar el dolor, Elena, la prostituta, controlaba este mundo, era una máquina"
Nacida en Rumanía, a los 18 años viajó a Italia para trabajar como empleada doméstica. Al llegar le esperaba su hermana y la pareja de esta y proxeneta. Durante meses intentó escapar del engaño, sin respaldo, sin papeles, cayó, según relata "en manos de la mafia argelina". Consiguió evitar que la captaran pero en ese momento supo que "la prostitución era la única posibilidad real de supervivencia". Escapó subiéndose a un avión. Hace 11 años llegó a Palma, "llegué a las doce del mediodía, me pusieron en la mano una dirección y a las nueve de la noche estaba ejerciendo". Durante los primeros días "trabajaba 24 horas al día y me refugié en el alcohol para no ver la realidad". Una vida "que no se elige, que no es un trabajo, es la esclavitud del siglo XXI".
Y se convirtió en Elena para soportar el dolor, para sobrevivir: " Elena la prostituta, la empoderada controlaba este mundo, era una máquina".
Le "asusta" oír hablar de regularización, "legalizar la prostitución ampara la violencia", afirma. Denuncia el "desamparo" de la Administración. "Somos invisibles, para protegerme primero tienen que escucharme. Los gobiernos nos dejan en manos de las ONG's".
Alina ejerció la prostitución durante 8 años. Un encuentro casual con un miembro de Médicos del Mundo fue la semilla que le animó a salir de ahí: "por primera vez en 8 años alguien me preguntó cómo estaba y me agarré a eso". A partir de ese momento empezó a colaborar con la entidad y a la vez seguía ejerciendo. Fue el camino intermedio que le permitió dejar la prostitución.
Gladis: " es traumático, prostituirme es la única alternativa a no dormir en la calle"
Gladis llegó a Palma en marzo de 2015 y lleva nueve meses ejerciendo la prostitución. Describe la situación más "traumática" de su vida y que "en ningún caso se elige". "Sin papeles no existe una alternativa real para nosotras", afirma.
Viajó a España en busca de una vida mejor, de un empleo. Un año después solo quiere recuperar su "antigua vida". "Me mintieron, en España no hay trabajo, no hay posibilidades". Su única motivación es conseguir el dinero que le permita retornar a su país.
Dos historias que se esconden tras las cifras que hablan de prostitución en nuestra Comunidad. En Palma, según datos oficiales, más de 2.000 personas ejercen la prostitución, el 95 por ciento son mujeres. Y de fondo, el marco legal. La prostitución y el proxenetismo no son ilegales es España.