¡Ave, Cesare!

Valencia

Gladiadores es lo que necesitará el nuevo entrenador del Valencia para librar su primera batalla en la liga española y en un escenario tan histórico como 'El Molinón'.

La primera condición para competir en el ensordecedor coliseo sportinguista pasará necesariamente por igualar las fuerzas en lo físico con los guajes de la escuela de Mareo, que poseen un gen luchador que les convierte en un adversario altamente peligroso.

El segundo requisito para salir victorioso de esa lucha con fragor será la aparición de la calidad de unos futbolistas sobrevalorados en el papel prensa y a los que se les han agotado las excusas. Otra derrota les precipitaría hacia la zona de descenso, con las tropas culés en el horizonte y camino de Mestalla, que confía toda su suerte al pulgar del ‘emperador’ Claudio Cesare Prandelli.

A tenor de lo ensayado por el técnico italiano a lo largo de la semana, el 'nuevo' Valencia que veremos en Gijón se va a parecer muy mucho al 'viejo' Valencia que estábamos viendo con Voro de entrenador... e incluso con Pako Ayestarán.

Prandelli ha trabajado estos días un dibujo de 4-2-3-1, exactamente el mismo que utilizó Voro en sus tres partidos en el banquillo, y prácticamente el mismo que empleaba Ayestarán, con el único pequeño matiz que Parejo con él actuaba en el trivote junto a Enzo Pérez y Mario Suárez, mientras que ahora adelanta un poco su posición para jugar en la mediapunta.

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Así pues, el primer Valencia de Prandelli, salvo sorpresón, va a ser el formado por Diego Alves en la portería; Montoya, Santos, Garay y Gayà en defensa; Enzo Pérez y Mario Suárez en el doble pivote; Cancelo y Santi Mina como exteriores en banda; con Parejo de enganche y Rodrigo en punta.

Respecto al equipo que Voro alineó contra el Atlético de Madrid tan solo cambiarían dos jugadores y los dos porque están saliendo de sendas sobrecargas musculares; Mangala dejaría su puesto a Garay y Nani, que se quedó fuera de la convocatoria, cederá su puesto a Santi Mina. El sello de Prandelli es de momento un calco del sello de Voro que, todo sea dicho, ojalá sea tan productivo como lo fue éste.

El Sporting lleva cuatro derrotas consecutivas, si bien tres fueron fuera de casa y la de El Molinón ante el Barcelona. El gran número de goles encajados (14) han sembrado las dudas en los aficionados, que esperan que su equipo recupere la imagen mostrada en las tres primeras jornadas ligueras en las que realizó un gran fútbol.

Abelardo no podrá contar con el central Babin, debido a una rotura de fibras en el gemelo de la pierna izquierda, lo que le deja solo con Amorebieta y Jorge Meré para el centro de la defensa.

Todo hace indicar que volverá a presentar la misma alineación del inicio de liga, una vez recuperado Nacho Cases y también Moi Gómez, que se perdió un partido debido a una lesión.