Regreso medio ilusionante

Irun

El regreso del Bidasoa-Irun a la Liga Asobal fue medio ilusionante. Medio porque pedió en casa del Villa de Aranda, pero lo hizo por culpa de una mala segunda parte, en la que se atascó completamente, y después de dejar escapar la renta de cuatro goles con la que llegó al descanso (10-14). Esa primera parte, notable en defensa y de un nivel atacante impresionante, debe servir al equipo bidasotarra para darse cuenta de que tiene capacidad más que suficiente como para competir con cualquiera, y es lo que debe ilusionar a la afición amarilla. Pero lo que ocurrió tras el descanso le debe llevar a reflexionar, porque echó por tierra todo su gran trabajo y se vino abajo con un castillo de naipes.

Ya había avisado su técnico, Jacobo Cuetara, que Bidasoa llegaba justo al inicio de liga, pero lo decía con la confianza del que sabe que tiene mimbres como para crecer. Eso demostró este Bidasoa, muy renovado para competir en la élite. Que tiene elementos como para confiar en el objetivo de la permanencia se puede lograr. Pero también demostró estar muy verde como para competir de verdad 60 minutos. El partido se le hizo largo, con parciales muy dolorosos, y recibiendo 18 goles en la segunda mitad, demasiados goles para volver con algo de botín en un partido fuera de casa.

El partido arrancó muy bien desde el principio para los intereses irundarras. Porque Bidasoa salió muy enchufado, logrando pequeñas ventajas que le fueron dando más confianza, hasta llegar a una máxima renta de cuatro goles, que es con la que se llegaría al descanso. Lancina, Muiña y Kauldi tiraban del carro goleador, mientras en defensa Popovic y Markel Beltza eran unos auténticos titanes. El resultado invitaba al optimismo. Al menos no volver de vacío a Irún. Pero todo se desmoronó tras el descanso. El Vlla de Aranda despertó, y Bidasoa se olvidó de repetir todo lo que le había salido en la primera parte. Hubo momentos claves que desnivelaron la balanza, como el siete metros fallado con un gol abajo, o la ocasión para Jon Azkue cuando se perdía 27-25, y podía espolear a Bidasoa hacia el empate. Detalles que se pagan en la élite. Esto es ASOBAL, para lo bueno y para lo malo. No sirve con competir y ser superior durante 30 minutos.