Ecologistas en Acción: “Todos los que hemos estado siguiendo el caso tenemos claro que el incendio fue intencionado”
La organización cree “evidente” que “la mano humana” provocó las llamas en Seseña

Cadena SER

Madrid
Ecologistas en Acción tiene el convencimiento de que el incendio de Seseña fue intencionado. “Todos los que de una manera u otra hemos estado siguiendo el caso tenemos relativamente claro que fue provocado. Evidentemente, tuvo que haber habido algún tipo de acelerante que solo la mano humana tiene a su alcance”, asegura en declaraciones a la SER el portavoz de la organización en Castilla La Mancha, Miguel Ángel Hernández.
Las labores de limpieza se están desarrollando a buen ritmo
Los neumáticos menos afectados se están trasladando a plantas de reciclaje aunque aún permanece la incertidumbre sobre la situación de las cenizas y los suelos contaminados. La organización ha publicado un informe junto con la universidad Rovira i Virgili según el cual la mayor parte del terreno está libre de contaminación salvo la urbanización de El Quiñón. “En términos generales hay un nivel de descontaminación alto, pero existe un foco de contaminación importante en el barrio de El Quiñón, donde se han encontrado contaminantes cancerígenos que superan en diez veces la contaminación que, por ejemplo, se recoge en el polígono de Taragona”, subraya Hernández.
Los niveles de Ozono no tienen nada que ver con Seseña
Los niveles de la calidad del aire no son preocupantes. La ciudad de Madrid supera ocho veces el umbral de aviso por ozono, pero esto no tiene nada que ver con el incendio de Seseña sino con el aumento de las temperaturas y la presencia de contaminantes derivados del transporte y el uso del vehículo privado.
La organización lamenta que las administraciones hayan repetido los errores del pasado en catástrofes medioambientales como el Prestige o la rotura de la balsa de Alnazcóllar en Doñana.