La esclavitud del siglo XXI oculta tras las luces rojas

Santander

No es la primera vez que la cineasta Mabel Lozano, aborda la realidad de las mujeres que prisioneras de una situación de pobreza, son captadas por las mafias a través de engaños para acabar  convirtiéndolas en esclavas sexuales.

"Chicas nuevas 24 horas", que ha recibido numerosos premios y estuvo nominada al Goya como mejor película documental, es fruto de un trabajo que comenzó hace cinco años y que se rodó en Colombia, Perú, Argentina, Paraguay y España. Las propias víctimas desvelan el trasfondo de un negocio que atenta contra los derechos humanos.

La propia autora nos ha contado en “A vivir” que para ella, no hay mejor recompensa que la de escuchar a los jóvenes contando como cambia su visión de la prostitución, una vez que ven este trabajo documental. De hecho, tuvo muy presente a sus dos hijos adolescentes a la hora de realizarlo. “Solo a través de la educación, se puede acabar con esta esclavitud del siglo XXI y es que si nadie comprara seres humanos, nadie trataría de venderlos”, ha resaltado.

Este martes lo han visto 350 alumnos del Instituto Marqués de Santillana y por la tarde se exhibe  en la Filmoteca de Cantabria a las ocho. Mabel Lozano protagoniza un coloquio una vez finalizada la proyección.