¡Hasta pronto!

San Sebastián

Ya está. Ya es matemático. El Retabet.es GBC ya es equipo de LEB tras certificar su descenso en Badalona, donde perdió 90-88, a pesar del gran partido que completaron los donostiarra. Mereció más, el castigo fue cruel. Porque lo pelearon hasta el final, se agarraron a un clavo ardiendo que terminó quemando demasiado. Pero fue el resumen de lo que ha sido todo el año, un quiero y no puedo que ha acabado como se esperaba. Quizá por eso, como decía su entrenador, Porfi Fisac, en la previa, ha llegado la hora de llorar. Porque esa derrota sí que duele. Y mucho. Es la certificación matemática en el día que mejor se ha jugado de los últimos meses.

Con un Jordi Grimau soberbio, que tiró del carro y se echó el equipio a la espalda, el GBC comenzó de forma espectacular, marcando diferencias de hasta diez puntos a favor, pero el partido poco a poco se les fue haciendo demasiado largo, y no fueron capaces de aguantar ese gran ritmo de anotación, dando la oportunidad al Joventut de meterse en el partido y complicarle la vida. Las bajas, las importantes ausencias que tenía el equipo donostiarra, que jugaba sin su artillero, Taquan Dean, en Donosti lesionado, empezaba a hacerle mella. Por mucho que Grimau o Marcus Landry, que terminaron ambos con 21 puntos, siguieran haciendo un gran partido.

El final agónico final, con un último minuto eterno, con tiempos muertos constantes para agarrarse a las últimas opciones de seguir en ACB, fue increíble. El equipo donostiarra se acercaba en el marcador, incluso empataba, se permitía el lujo de soñar, peleaba hasta la extenuación, pero dos ex GBC como Miralles y Sergi Vidal le daban las puntilla poniendo el 90 en el marcador del equipo catalán. El GBC no llegaba, perdía y certificaba su descenso a la LEB, y esta vez parece que los despachos no le van a salvar. El último desciende seguro. Y el GBC es último. Habrá que agarrarse al futuro, y en el futuro seguro que volverá a la élite. Así que... ¡hasta pronto GBC!