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DOS HERMANAS

Antonio Nazaré indulta un toro de Torrehandilla en su encerrona

El diestro nazareno logró un total de nueve orejas y un rabo

Antonio Nazaré, durante su actuación en solitario en Dos Hermanas / Álvaro Pastor

Antonio Nazaré, durante su actuación en solitario en Dos Hermanas

Dos Hermanas

El torero sevillano Antonio Nazaré saldó con nueve orejas y el indulto de un toro de Torrehandilla su encerrona solidaria. Nazaré derrochó elegancia y oficio, compostura en la figura y temple en las muñecas ante toda la buena corrida de sus apoderados.

Se encerraba Antonio Nazaré en su tierra, Dos Hermanas, este sábado 30 de abril, después de no verse anunciado en los carteles de Sevilla. Lo hacía por una causa benéfica y con seis toros de Torrehandilla-Torreherberos como materia prima de su gran cita.

El diestro nazareno ofreció una gran tarde de toros con una importante dimensión de capacidad. Esfuerzo de Antonio que se ha entregado de principio a fin y ha terminado la histórica encerrona igual que empezó. Muy fresco, sin aparente pesadez y fluido de toreo con una nueva demostración de suave temple. Otra de las virtudes del sevillano fueron sus estocadas y solo un pinchazo a cinco toros, y su variedad de quites y el excelso manejo del capote. 

Un festejo con dos partes bien diferentes. Mejor la primera la primera. A la postre, un compendio de Antonio Nazaré que terminó con nueve orejas y rabo –dos y rabo simbólicos del indultado 3º– en el esportón y recibiendo el cariño de un público entregado.

Ante el primero, se abrió bien de capa Nazaré con varias verónicas templadas y acompasadas al cuerpo, rematando con media en el tercio. Comenzó por alto Nazaré la faena de muleta, sin apretar al flojito pero con mucha clase primero, que se vino poco a poco arriba en una tanda muy templada con la mano derecha que hizo sonar la música. Toro encastado, con fondo. Brindó Antonio el primero de la tarde a los padres de Javier y Celeste, niños por los cuales se celebraba esta corrida benéfica. Muy bien el torero nazareno con tandas por ambas manos, templadas, profundas y toreando con la cintura, llevando mucho cada muletazo. Estocada entera para cortar una oreja.

Al segundo de la tarde, lo recibió Nazaré rodilla en tierra con el capote, con tres verónicas y una media a mano cambiada. Bien presentado y encastado este segundo, con el que se lució Azuquita en banderillas. Más brusco en las embestidas, siempre con la cara arriba en el final del muletazo y mirón por el pitón izquierdo, lo entendió muy bien Antonio, siempre mandando en la faena, firme y templado. Logró varias tandas con la izquierda muy profundas. Tiró de valor y torería al final de la faena, con varios pases cambiando de mano y con un arrimón final. Estocada y dos orejas.

Extraordinario fue el precioso jabonero que hizo tercero, el número 35 'Voltereta', de Torrehandilla, jabonero que terminó siendo indultado a pesar del remiso presidente y ante el clamor popular, después de una rotunda faena en la que Nazaré bordó el toreo con el animal. El de más trapío de lo que iba de tarde, qué buen son y ritmo en las embestidas. Lo recibió con verónicas templadas el torero de Dos Hermanas, que se lució por un quite por chicuelinas. Comienzo con la franela en los medios, con una gran tanda con la derecha. Se arrancaba el animal con alegría, transmisión y clase que aprovechaba muy bien Nazaré por ambos pitones con tandas largas, templadas y profundas. Gran toro este jabonero Torrehandilla. Hubo una tanda muy templada con la izquierda, llevando mucho al animal, que repitió con codicia y armonía. Muleta peinando el albero en cada muletazo, se gustaba el Nazareno, que estaba muy a gusto con el animal. Gran toro este tercero y gran toreo de Antonio Nazaré.

Varias verónicas de recibo al cuarto ejecutó Nazaré, y una media en el tercio fue el comienzo de capote al cuarto de la tarde. Toro más flojito de fuerza y protestón en las embestidas. Comenzó por alto con la muleta ayudando al animal y sin forzarlo. Poco a poco lo metió en la muleta con firmeza y temple en cada tanda, sin tirones bruscos y suavidad en los muletazos con la mano derecha. Muy firme Nazaré con el manejable animal, la estocada le propició una oreja.

Comenzó Antonio de rodillas con una larga afarolada a la salida del quinto. Poca fuerza el de este toro, de buenas hechuras, sin embargo. Se fue a los medios el de Dos Hermanas y comenzó con tres pases cambiados por la espalda y una tanda con la derecha templada y a media altura, para no forzar a un animal blandito, con poca fuerza pero muy noble. Importante arrimón el que se metió Nazaré con el quinto. Pinchazo y estocada para cortar una oreja.

Comenzó bien de capa Antonio Nazaré en el sexto, con cuatro verónicas templadas. Y un quite con el capote a la espalda. En el comienzo de muleta recibió una fuerte voltereta sin consecuencias. Muy bien con la derecha con un toro de recorrido y encastado al que Nazaré entendió a la perfección por ambos pitones. Grandes muletazos con la zurda, templados, largos y profundos que pusieron en pie al público. Buen toro este sexto de Torrehandilla, con transmisión y recorrido. Gran faena la del torero Nazareno al sexto de la tarde, con muletazos largos con la mano derecha, mandando y llevando las buenas embestidas del animal. Estocada. Dos orejas.

En definitiva, Antonio Nazaré solventó con un rotundo éxito su encerrona ante sus paisanos que llevaban cinco años sin toros en su Feria. Nazaré desplegó en todos los tercios la amplia gama de su variado repertorio. Diverso, garboso, con empaque y alegre con el capote, incluso en largas cambiadas y sin perdonar un quite. Antonio muy entregado, firme, y dominador con la muleta, se expresó con un toreo fluido, profundo y bello. Triunfó el toreo en todos los sentidos de Antonio Nazaré en una tarde histórica y solidaria.

 
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