Más de 2.000 personas claman en León por un conservatorio digno

León

Al grito de "consejero, dimite, León no te admite", más de dos mil personas se manifiestaban este jueves en León bajo el lema "No nos vamos al estadio, por un conservatorio digno". Apoyados por todas las asociaciones vecinales de León y todos los partidos políticos, salvo el PP, la protesta tuvo como fin presionar a la Consejería de Educación para que deseche el plan de trasladar el conservatorio a un lateral del estadio de fútbol Reino de León, acordado con el Ayuntamiento. Los manifestantes reclamaron a la administración autonómica que cumpla su compromiso de construir un nuevo centro o, en su defecto, que llegue a un acuerdo con la Diputación provincial para reformar las actuales instalaciones.

Al inicio de la manifestación, la directora del centro, María Jesús Astorga, ha hecho un llamamiento a los políticos para que reflexionen acerca del controvertido proyecto. "Aquí hay mucha gente que no tiene que ver con el conservatorio. Hay muchos ciudadanos que se han visto sorprendidos porque se desplace un centro enseñanza al campo de fútbol, a un edificio que a todo el mundo le parece inadecuado", advierte la directora. "Creo que deberían reflexionar", asegura.

La directora del centro manifestaba su interés en retomar los contactos con la Consejería y dialogar con su titular, el leonés Fernando Rey. "Queremos verle, tenemos nuestra mano tendida. Sólo queremos que vuelva la paz a la comunidad educativa".

Al término de la manifestación, que discurrió entre el Conservatorio y la Plaza de Botines, los alumnos del Conservatorio interpretaron varias piezas como la Sarabande de Handel, la Primavera de Vivaldi o la Sexta sinfonía de Schubert. Un entregado director de orquesta, el profesor Juan Luis García, hizo posible que la plaza de Botines se pusiera a bailar a ritmo de los valses del compositor austriaco. A pesar de todo, la pieza más esperada fue, sin duda, la interpretación del Himno de la Champions League, que los alumnos ensayaron concienzudamente durante los últimos días para poner el broche final a esta manifestación.