Lanbide intermedia en 3 de cada 100 contratos
De cada 100 contratos en Euskadi, solo un 3,13% se realizan a través de Lanbide. Un informe de Confebask lo sitúa en el 9º recurso para contratar
Irekia
Bilbao
Los datos de intermediación laboral de Lanbide no contradicen las palabras del viceconsejero de empleo, José Andrés Blasco, que en un foro con jovenes organizado por Adecco, aseguró que "a mis hijos ni se les pasa por la cabeza apuntarse en Lanbide para buscar un empleo, entre otras cosas porque poco se encuentra ahí", declaraciones rectificadas un día después, destacando la labor "formidable" de Lanbide.
En Cadena SER Euskadi nos hemos preguntado si funciona Lanbide, que el creador del INEM vasco, Joseba Akzárraga, cree que ya no. Los datos oficiales del servicio vasco de empleo reflejan una tasa de intermediación muy baja: de cada 100 contratos en Euskadi poco mas de un 3% se realizan gracias a la intermediación de Lanbide, exactamente un 3,13%, el último dato conocido, correspondiente al mes de diciembre. El dato mejora en un punto el que existía a principio de la legislatura, pero lejos del 5% que se marcó el Gobierno Vasco como objetivo.
Lakua ha reconocido en más de una ocasión que Lanbide está colapsado por la gestión de la RGI y no cumple con su tarea de intermediación laboral.
Según el informe sobre necesidades de empleo presentado recientemente por Confebask, Lanbide es uno de los últimos recursos, si no el último para contratar. Lanbide aparece en el noveno lugar, después de los contactos personales, centros educativos, empresas de trabajo temporal, agencias privadas de colocación, bolsas propias o a través de Internet.
El consejero de empleo, Ángel Toña, reconoce que su número dos no estuvo bien al minusvalorar las capacidades de Lanbide, y que la expresión que utilizó el viceconsejero de empleo "no fue afortunada". Añade que el derecho a la equivocación nos asiste a cualquier persona, así como la obligación que todos tenemos a corregir nuestras palabras cuando nos equivocamos".
Belén Arrondo (EH Bildu) ha pedido directamente la dimisión de Blasco porque, a juicio de su grupo, ha quedado "totalmente inhabilitado para seguir en el cargo" y ha advertido de que un viceconsejero de Empleo no puede decir que Lanbide es un servicio "inútil" para buscar trabajo.
Jon Azkue (PSE) ha considerado que Blasco "debe quedarse en su casa" y no incorporarse a un cargo del que depende un servicio en el que "no cree" y ha opinado que si el viceconsejero no cesa por voluntad propia, el Gobierno Vasco tendría que destituirle.
Laura Garrido (PP) ha pedido ir "más allá" de la dimisión de una persona y acometer un cambio "radical" de rumbo y de modelo en Lanbide porque lo que ha hecho Blasco es "corroborar su desastrosa gestión", algo "preocupante" ya que Euskadi tiene la competencia en materia de políticas activas de empleo.
