La subida del Cristo de la Expiración marca la cuenta atrás
Este acto supone, dentro de la Cuaresma granadina, el inicio del tiempo de descuento para la Semana Santa
Granada
La hermandad de los Escolapios volvió a ser el gran reclamo del domingo de la quinta semana de Cuaresma. El acto de traslado del Cristo de la Expiración desde la sacristía hasta la nave del templo de san José de Calasanz y la subida del crucificado de Sánchez Mesa hasta su paso, concitó a cientos de cofrades que no quisieron perderse este evento, caracterizado por su recogimiento y solemnidad.
Se trata, sin duda, uno de los actos más concurridos de la Cuaresma granadina y que sirve, además, para marcar prácticamente el punto final de este tiempo de espera y penitencia, anunciando la inminente celebración de la Semana Santa.
Con el acompañamiento musical del órgano y el coro Psallite Deo, una representación de las mujeres de la cofradía escolapia fueron las encargadas de portar al Cristo de la Expiración hasta el centro de la nave. Asimismo, los rezos de la letanía de los santos y las siete palabras fueron dando lugar a la subida de la imagen que, suspendida del coro, fue encajada en el paso que tallase hace dieciséis años Antonio Guzmán.