El Obra cae con la cabeza bien alta. 77-79
Tuvo opciones hasta el final, pero acabó perdiendo por dos puntos
ElObra cayó con orgullo / Obradoiro CAB
Santiago de Compostela
La afición del Obradoiro puede estar bien orgullosa de su equipo pese a caer en cuartos de final ante el Baskonia. Los de Moncho Fernández se dejaron la piel sobre el parket del Coliseum de A Coruña y brindaron a los más de diez mil espectadores que abarrotaron la gradas un partido épico, de raza. Raza y orgullo de equipo que quedaron colgados del techo del pabellón coruñés que vibró durante todo el encuentro con todo lo que sucedió en la pista.
El Rio Natura Monbus Obradoiro estuvo inmenso y durante muchos minutos pensó que lo imposible era posible.El 6-0 inicial de los locales fue respondido por un incontestable 4-24 baskonista de la mano de Causeur, Hanga y Bourousis. Los gallegos consiguieron nivelar el choque con su defensa en el segundo periodo y, una vez acabaron con su maleficio desde el 6,75, entraron de lleno en el partido (30-35) dándole la vuelta al choque en el tercer periodo (60-58), en el que los de casa vivieron su momento más dulce. Sin embargo, Hanga siguió anotando triples, hasta la media docena, para entrar en la historia baskonista y para ponerle muy complicado el partido (70-75, m.39) a los de Moncho López, que tiraron de orgullo para poder forzar la prórroga a tres segundos del final. Waczynski, el máximo anotador de la Liga Endesa, capaz de anotar los últimos 27 tiros libres en la regular, erró el tiro más importante y el sueño del primerizo acabó. Pero no su orgullo y su grandeza, para suerte de un Laboral Kutxa que pasa así más reforzado a semifinales.
