- ¿Me abre el ascensor? - No es mi cometido

Córdoba

Imaginen la situación: un padre acude al Colegio Público Averroes con su hija, que tiene necesidades especiales. Acude a ese centro, edificio público, para reunirse con la comisión de valoración dependiente de la Junta de Andalucía que tras evaluar a la niña establecerá el grado de necesidades especiales y las soluciones para garantizar que esa niña, o ese niño, puedan continuar con normalidad su escolarización.

Como el edificio es grande y con el ánimo de aprovechar el espacio del edificio, esa comisión, que depende de la Junta de Andalucía, se ubica en un despacho de la tercera planta del colegio. Al llegar al colegio, la familia pretende usar el ascensor para subir a esa tercera planta, pero el ascensor tiene llave. En el edificio hay un bedel, que depende del Ayuntamiento y por tanto forma parte de la plantilla de personal municipal. El padre en cuestión le pide al bedel la llave. En definitiva, le pide que les permita usar el ascensor, pero el bedel se niega. No les da la llave porque no está en su cometido al ser personal municipal y al ser el destino de la familia un servicio dependiente de la Junta de Andalucía.

El padre de la familia, atónito, carga con su hija en brazos, sube las escaleras y llega a la comisión de valoración. Este caso, que hemos conocido por el testimonio de Bernardo Jordano, no ha sido un caso puntual, sino que se repite con frecuencia. El AMPA del centro educativo y los padres que se han visto en esta situación ya han protestado. Su historia nos la han contado en Córdoba Hoy por Hoy.

Educación de la Junta de Andalucía asegura que va a haber una inspección y remitirá su resultado al Ayuntamiento de Córdoba, de quien depende el personal implicado en estos hechos. Mientras tanto, es el equipo directivo del centro el que amablemente se ha prestado a activar el ascensor cuando sea necesario mientras el bedel mira desde “su pecera”.