Economia y negocios | Actualidad
Desarróllate

Cómo pedir a los demás en el trabajo para obtener resultados

Toya Zuriaga, coach ejecutivo y experta en recursos humanos y desarrollo directivo nos da las pautas para pedir sin sobrecargar

Désarróllate

Désarróllate

07:50

Compartir

El código iframe se ha copiado en el portapapeles

Valencia

 El título de hoy trae consigo la reflexión acerca de cómo pedimos a los demás y si nuestra manera de hacerlo nos trae los resultados que esperamos. Con ello, quizá nos demos cuenta de que hemos de prestar más atención a cómo se desarrollan las conversaciones que tenemos en el entorno laboral, cómo nos relacionamos con nuestros compañeros y cómo pedimos cosas.

La palabra pedir no supone lo mismo para todas las personas, o bien no todos entendemos lo mismo por “hacer una petición”. Podemos pedir cuando lo necesitamos, de manera sincera, no dando las cosas por supuestas, y dando opción a que la persona exprese lo que piensa de la petición; o bien no tener en cuenta estos parámetros, manifestando necesidades sin pedir, rogando, seduciendo, imponiendo y olvidando entonces las condiciones necesarias para los compromisos (libertad del otro y sinceridad por nuestra parte).

Por otra parte, también hay que destacar a quien le cuesta solicitar ayuda, realiza las tareas en solitario porque quizás teme que le digan que no, porque no quiere mostrar su vulnerabilidad, o cree que así “lo hace más rápido” y paga un alto precio sobrecargándose de trabajo.

Aspectos que hemos de tener en cuenta a la hora de hacer peticiones:

1) La preparación: pensar qué voy a pedir, qué quiero conseguir, qué es lo que necesito de la otra persona, qué beneficio puede obtener el/ella de mi petición, buscar el mejor momento, lugar, e ir acompañados del estado de ánimo que haga posible que mi petición sea bien acogida y en último extremo aceptada.

2) La petición propiamente dicha: ser específico con lo que se pide y se desea obtener, y tener en cuenta que la persona puede, tanto aceptar nuestra petición, como rechazarla. Además también puede posponer respuesta para otro momento o contra ofrecer y querer negociar. Y todo ello es legítimo.

3) El compromiso: si hay acuerdo tras la petición es conveniente repasar las condiciones que hemos quedado por parte de ambos y decirlo en voz alta para que quede claro, repetirlo. Hemos llegado a un compromiso.

Tras la petición pueden abrirse escenarios de cumplimiento o incumplimiento. Ante esto ¿qué hemos de hacer?

1) Si cuando llega el momento el otro no cumple su compromiso, como ya se ha llegado a un acuerdo hay derecho a reclamar. Será siempre ante la persona que se comprometió (no vertiendo quejas sobre ella a terceros), dando un margen para que pueda reparar lo que ha sucedido, sin emoción negativa y lo antes posible.

2) Si cuando llega el momento, quien incumplo soy yo, tengo derecho a una disculpa reconociendo el compromiso que teníamos asumido, ofreciendo una explicación, tratando de ofrecer alternativa de solución, y negociando un nuevo compromiso.

Puede suceder también que nos comprometamos a algo y luego nos demos cuenta de que no podemos realizarlo, ante lo cual hemos de comunicar inmediatamente nuestra dificultad y tratar de negociar nuevamente, bien sea plazos, objetivos, etc. Si esperamos será peor para la relación, ya que le incumplimiento afecta directamente a la confianza y puede generar resentimiento en el otro.

Quique Lencina

Quique Lencina

Filólogo de formación y locutor de profesión, actualmente forma parte del equipo digital de Radio Valencia...

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00