Triana siembra dudas sobre su inocencia en su declaración ante el fiscal
La acusada muestra debilidades en su argumentación a la hora de justificar su presencia en el escenario del crimen y su desconocimiento del plan homicida de su madre
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Triana Martínez, acusada del crimen de la presidenta de la Diputación de León Isabel Carrasco, durante la declaración
León
Para intentar desmontar el argumento de la defensa de que Triana no conocía los planes de la madre ese día, el Fiscal hizo mucho hincapié en reproducir las horas previas y el momento del asesinato. Así, interrogó a la acusada sobre por qué salieron de casa con gorros, guantes y un par de cazadoras en un día soleado del mes de mayo. Triana pasó aquí dificultades para justificarse alegando que habitualmente vestían guantes para hacer frente al frío y que portar dos cazadoras se encuadra dentro de "una manera de vestir".
El Fiscal interroga a Triana sobre el día del crimen
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El Fiscal también ha puesto especial celo en tratar de esclarecer el papel de Raquel Gago después del crimen. Aquí ha sido donde Triana se ha mostrado más imprecisa. Sostiene que llamó a Gago después del crimen con un móvil prepago porque se puso nerviosa y no fue capaz de desbloquear su iphone 5s. Ha justiificado la existencia de este segundo teléfono diciendo que "Lo tenía para hablar con un amigo sin que mi padre se enterase". Asegura que prefirió llamar a Raquel, aunque la estaba viendo en la otra acera, porque estaba charlando con otra persona y lo hizo únicamente para ver si habia visto a su madre, a la que perdió de vista tras ver como arrojaba el bolso "Lo cogí porque pensé que estaba dentro la pistola reglamentaria de mi padre", ha dicho. Además exculpa en todo momento a la agente de la policía local. "Lamento haber dejado el bolso en su coche. No quería meter a Raquel en un lío"
Juicio Carrasco Triana responde al Fiscal
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Triana también ha negado participar en los seguimientos a Carrasco o tener conocimiento de las búsquedas sobre armas realizadas en su ordenador.
Así mismo, durante su declaración, ha insistido en la tesis de las irregularidades supuestamente cometidas durante los primeros interrogatorios a los que fueron sometidas madre e hija. Triana aseguró que los policías aclararon desde el principio que estaban allí "para ayudarla" y que "no tenía de qué preocuparme".
Respecto al detonante de su mala relación con Carrasco, Triana insiste en el supuesto episodio de propuestas sexuales que le realizó la presidenta de la Diputación y que fue rechazado por ella "Yo no me quise acostar con ella". Después de ese momento, Triana asegura que comenzó su persecución laboral que desencadenó en que no se le concediese la plaza de técnico de telecomunicaciones que "se creó para mi". La acusada mantiene que Carrasco "enchufó a otra persona" de Burgos.
El Fiscal interrogó a Triana sobre el motivo que le llevó a ocultar el supuesto acoso sexual en un principio. "Me daba vergüenza" argumentó Triana que hasta siete meses después del crimen no hizo referencia a este episodio.