Valencia, vértice de la ruta de la seda

Valencia

Valencia arranca como capital de la Seda. Cuatro años por delante, hasta 2020, para colocarla en un mapa del que forman parte 33 países que tiene su origen en la ciudad china de Xian y 9090 kilómetros al este el otro extremo en el Mediterráneo, en la ciudad de Valencia. Cruce de rutas marítimas y terrestres europeas y nexo de unión con las rutas con América.

La Unesco ha decidido que Valencia recupere el protagonismo que tuvo cuando aquella ruta de la seda (que también lo fue de la pólvora o del café) y para ello en este año será sede, en Fallas de la reunión del Comité Directivo de la UNESCO. Aprovechando además que este año la UNESCO debe pronunciarse sobre si las fallas se convierten en patrimonio de la humanidad y recordando que la fiesta fallera, por los trajes de valenciana, tiene una gran vinculación con la seda.

Y en junio, Valencia será sede del segundo encuentro internacional del Programa Unesco de la Ruta de la Seda aprovechando que en 2016 la Lonja cumple 20 años como patrimonio de la Unesco y que en mayo se inaugurará la reforma y remodelación, gracias al mecenazgo de la fundación Hortensia Herrero, del Colegio del Arte Mayor de la Seda. Como ha explicado el coordinador en España del proyecto ruta de la seda, José María Chiquillo, Valencia quiere ser protagonista.

Y la Unesco tiene claro que el proyecto no puede quedarse simplemente en esos actos. Por eso quiere que, dado que el proyecto cuenta con el apoyo de gobierno central, autonómico y local, genere beneficios económicos con la seda. Creando elementos, que como el Colegio de Arte Mayor puedan tener tirón turístico y fomentando también otros de investigación y de elaboración de elementos de seda, recordando que Velluters fue sede del importante gremio de artesanos sederos valencianos que levantaron la Lonja.

Annick Thebia, consultora internacional de la Unesco, también apunta, por eso, la necesidad de hacer constar que el kilómetro 9090 de esa ruta está en Velluters.

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Y la cosa no acaba ahí. Valencia tiene el encargo de realizar cartografiar todo lo que en la Comunitat Valenciana tiene relación con la seda. El museo Liber de los soldaditos de plomo creará una sala específica y trabaja en una recreación de la ruta avalada por un panel científico. Se han organizado conferencias y mesas redondas y se quiere aprovechar para recordar figuras como la de la beata Juana María Condesa Lluch que luchó por los derechos de las trabajadoras valencianas de la seda. E incluso se quiere aprovechar también para subrayar otro proyecto Unesco: la ruta del Santo Grial, el Santo Caliz valenciano, pero despojándolo de su dimensión religiosa en favor de su dimensión simbólica.

Y por último otro símbolo: el Instituto Confucio dedicará este año el desfile del año nuevo chino, el seis de febrero, a Valencia Ciudad de la seda.