Educación advertirá a las familias sobre los falsos padrones

Vitoria

“Estamos ante una práctica fraudulenta sobradamente conocida por Educación, sin que hasta ahora se hayan tomado contra ellas medidas que se puedan considerar suficientes” decía este jueves el Ararteko, Manuel Lezertua, durante la presentación en el Parlamento vasco de su memoria anual.

Es cierto. No es una práctica nueva. Hablamos de familias que empadronan a sus hijos en otra residencia que no es la suya, como la de un familiar que se presta a ese fraude, con el fin de conseguir plaza en el centro deseado y que sin los puntos de zona, 5 o 2 si es limítrofe, sería imposible. Son padrones falsos, cuya antigüedad, reciente y para la ocasión, suele delatar la trampa.

Al respecto, Educación da por fin un paso para intentar atajar esta práctica. De cara al próximo curso, expresamente en las matrículas, apercibirá a las familias de que el uso de falsos padrones para conseguir una plaza supondrá la pérdida de los puntos conseguidos.

Es la primera vez que la advertencia adquiere rango oficial. Es un paso. Sin embargo todo se fía a que alguien presente una denuncia como hacen ya algunas familias.

Actuar de oficio está descartado. Fuentes del departamento de Educación consultadas por la SER consideran inviable comprobar de oficio si hay trampas en las decenas de miles de matrículas que tramita y recuerda que los certificados de padrón que emiten los ayuntamientos son documentos oficiales. Así que deberá mediar una denuncia para que las delegaciones de Educación actúen.

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¿Qué va a cambiar?. Dice Educación que agilizará las denuncias para que, en colaboración con los ayuntamientos, se resuelvan antes de que comience el curso. Hasta ahora, admite que ese proceso se alargaba demasiado y no tenía consecuencias prácticas. Pero, si en la próxima matriculación se verifica cualquier sospecha, se restarán automáticamente los puntos de zona que en la mayoría de los casos supondría la pérdida de la plaza.