Carmena quiere reformar la plaza de España
El Ayuntamiento, abierto a la colaboración público-privada, entierra el plan elaborado por Ana Botella y anuncia la convocatoria de un concurso internacional de ideas
Madrid
La madrileña plaza de España será reformada durante este mandato. El equipo de Carmena descarta el plan que dejó listo Ana Botella y lo primero que va a hacer es lanzar un concurso internacional de ideas a principios de octubre. El anterior equipo de Gobierno calculó que el coste de la operación sería de unos 80 millones de euros, parte de los cuales iban a salir de la financiación privada. El grupo inversor chino Wanda, propietario del Edificio España, llegó a un acuerdo verbal con el Ayuntamiento para costear un tercio de la operación.
El Gobierno de Carmena (Ahora Madrid) también desea contar ahora con esa colaboración para impulsar la reforma de esta plaza y de su entorno. "Estamos abiertos a la colaboración público-privada para encontrar líneas de financiación que hagan asumible el coste en los presupuestos", ha detallado José Manuel Calvo, delegado de Desarrollo Urbano Sostenible. Las bases del concurso, “abierto a los estudios de arquitectura e ingeniería más prestigiosos”, y los plazos serán presentados durante la Semana de la Arquitectura.
La remodelación planteada por la anterior Corporación municipal incluía el soterramiento del paso elevado entre Bailén y Ferraz, la ampliación del espacio peatonal de 28.000 a 41.000 metros cuadrados y la revisión de todas las especies vegetales plantadas, además de la creación de un centro cultural subterráneo dedicado a Miguel de Cervantes.
La reforma que, de momento, queda aparcada es la de la Puerta del Sol. El delegado, ha concretado que "no es una prioridad". "Creemos que es mejorable su organización y disposición urbana pero es un espacio que funciona relativamente bien", ha argumentado. El Gobierno municipal prefiere apostar por la regeneración de la plaza de España y de los barrios.
En cuanto a la Operación Canalejas, pendiente aún de la licencia definitiva para que el grupo Villar Mir pueda levantar un complejo de 8 plantas con hotel de lujo y un gran centro comercial, el Ayuntamiento está en contra del impacto visual del proyecto. Urbanismo no quiere que el volumen supere la cornisa que hay a la vista desde el edificio de Apple en la puerta del Sol. Igualmente, considera “discutible” la plataforma subterránea para autobuses incluida en el proyecto. Aun así, el Ayuntamiento considera que la operación no está paralizada y que continúan las conversaciones con la constructora OHL para “mejorar el proyecto”.