Frío encuentro entre la DGA y los obispos
La modificación curricular de la LOMCE reduce de dos horas semanales a una la asignatura de religión. Este cambio no ha gustado a los obispos aragoneses
Reunión entre la consejera Mayte Pérez, el arzobispo de Zaragoza, Vicente Jiménez, el obispo de Huesca y Jaca, Julián Ruiz, y el obispo de Teruel y Albarracín, Carlos Manuel Escribano. / GOBIERNO DE ARAGÓN
Zaragoza
La modificación curricular de la LOMCE, impulsada por el nuevo ejecutivo autonómico, reduce de dos horas semanales a una la asignatura de religión. La Consejería de Educación y los obispos aragoneses se han reunido este lunes y en ese encuentro se ponían de manifiesto sus diferencias.
Los obispos hablan de una reducción drástica del horario, apelan a los acuerdos entre el Estado y la Santa Sede y plantean algunas consecuencias de la decisión del gobierno aragonés. Vicente Jimenez, arzobispo de Zaragoza, señaló que "nos movemos en los niveles de aplicación de los acuerdos Iglesia - Estado, que tienen rango de ley orgánica y de ley internacional". Y añadió: "creemos que no se puede desarrollar con calidad el currículo aprobado y se quedan en una situación laboral muy precaria los profesores de religión".
Por su parte, la consejera Mayte Pérez asegura que se han ajustado a los mínimos que marca la ley y añadió que "si nosotros incumplimos la legalidad, el Ministerio está incumpliendo la legalidad porque lo que hemos hecho es una estricta interpretación jurídica de los mínimos del real decreto". Sobre la situación del profesorado, desde el Gobierno de Aragón han abierto un cauce de diálogo para buscar soluciones porque, aseguran, no quieren perjudicar laboralmente a nadie.
