Triunfo con sabor a Primera
Rubén Castro y Jorge Molina, una vez más, marcaron el camino del triunfo de un Betis que sufrió en exceso ante un paupérrimo rival


Sevilla
El Betis logró en Mallorca un triunfo importantísimo que tiene mucho sabor a Primera División. Y lo hizo gracias a esa dupla de delanteros que es todo un lujo para la categoría: Rubén Castro y Jorge Molina volvieron a marcar para darle los tres puntos a un Betis que jugaba en Mallorca con la presión de haber visto cómo sus perseguidores inmediatos ganaron sus partidos en la tarde anterior. Eso sí, la imagen dada no termina de ser convincente y el equipo sufrió más de la cuenta ante un flojo rival. Tiempo habrá -incluso en esta crónica- para analizar lo negativo pero, tras una victoria tan importante, sería injusto no quedarse primero con lo positivo.
Y lo primero es darle un reconocimiento a esa pareja de delanteros que tantos goles y tantos triunfos le están dando al Betis. La primera parte que ha hecho Rubén Castro ha sido sencillamente genial. Gol, pase de gol, y una participación 'venenosa' en casi todas las jugadas de ataque. Con el tanto marcado en Mallorca está a un sólo gol de igualar la marca de 27 que logró en su primera temporada en el Betis. Que a sus casi 34 años se supere y esté a un paso de mejorar sus números de hace cuatro temporadas, es para hacerle un monumento. Y no sólo marcó sino que asistió a su compañero Jorge Molina en la jugada del segundo gol. Sólo faltó que entrara el balón que envió a la cruceta, tras ver al portero adelantado, y que éste sacó con apuros.
De Jorge Molina, poco que decir que no se haya dicho ya. Decisivo está siendo en la recuperación del Betis de esta temporada, con unos números que aún le mantienen como mejor goleador del equipo desde que llegó Mel. Y Portillo... El malagueño ha realizado en Mallorca su mejor partido desde que es futbolista del Betis. Se ha hinchado a meter pases interiores y a dar asistencias de gol a los delanteros. Si su físico se lo permite puede convertirse en un futbolista importante para el equipo.
Lo más importante son los tres puntos. El Betis mantiene sus ventajas respecto a sus rivales con una jornada menos por disputar pero no por ser el líder destacado se pueden obviar las enormes carencias que tiene el equipo. Maciá ha visto el partido in situ. Y habrá tomado buena nota. Por ejemplo, de lo endeblita que es la defensa a poco que le aprieten un poquito o tenga enfrente a un rival con un mínimo de calidad. O como propicia ella misma -errores arbitrales al margen- los goles del rival, como ocurrió la pasada semana ante el Llagostera o en la matinal balear. Porque fue un error descomunal de Jordi Figueras lo que permitió que el Mallorca se metiera en el partido. Luego es verdad que el asistente hizo el resto comiéndose un clamoroso fuera de juego -como la pasada semana- del autor del gol, Xisco. O habrá tomado nota también Maciá de la falta de control de un centro del campo que ni luce por construir ni se destaca por destruir. O cómo el lateral izquierdo no tiene nivel para jugar en el Betis. Y así podríamos seguir con otras demarcaciones y otros nombres propios.
Hay quien cree que el ascenso del Betis -porque ya no se le puede escapar- es un milagro. Algo de milagroso sí que tiene pero, sobre todo, lo que hay es un pareja de delanteros que es la mejor de la categoría y que va a volver a subir al equipo, como ya ocurriera en 2011. Y ello ocurre gracias también a ese entrenador-milagro que es Mel para el Betis. El juego es pésimo en muchos partidos, sí, pero ahí tiene al equipo, con un pie en Primera. Si, además de esto, le unimos un buen portero, un futbolista como Portillo que tiene calidad de sobra para desequilibrar, y un jugador como Dani Ceballos que va a más -destacable su partido en Mallorca aun jugando con el tobillo maltrecho-, encontramos la explicación al milagro.
Gran triunfo del Betis. La Primera está a la vuelta de la esquina. Pero que los principales responsables de lo deportivo -Mel, Maciá...- no pierdan la perspectiva: tienen mucho trabajo este verano por delante, con mucha baja que dar y mucho fichaje por hacer. Mientras tanto, disfruten y sigan haciendo cuentas -ahora sí- sobre cuándo y dónde se va a producir el ascenso matemático del Betis.
FICHA TÉCNICA:
Mallorca: Cabrero; Company, Bigas, Truyols, Saborit (Riera, m. 64); Bustos (Fofo, m. 79), Yuste, Javi Ros (Arana, m. 61), Marco Asensio; Joselu y Xisco.
Betis: Adán; Molinero (Piccini, m. 86), Bruno, Figueras, Casado; Portillo, Xavi Torres, N’Diaye (Lolo Reyes, m. 80), Dani Ceballos (Cejudo, m. 75); Jorge Molina y Rubén Castro.
Goles: 0-1, m. 16: Rubén Castro. 0-2, m. 33: Jorge Molina. 1-2, m. 36: Xisco.
Árbitro: José María Sánchez Martínez (murciano). Amonestó a los locales Bigas, Yuste, Company, Martí (en el banquillo), Xisco, Bustos y Riera; y a los visitantes Figueras, Xavi Torres y Dani Ceballos.