Etxerat en la Lehendakaritza

Bilbao

Por primera vez un lehendakari ha recibido oficialmente a los familiares de presos. Urkullu formaliza la relación, aunque ya habló momentaneamente con Etxerat en Loiola. Ibarretxe también intentó acercarse, les invitó a una recepción en el Día de los Derechos Humanos, aunque al final no les dejó entrar porque tuvieron el detalle de manifestársele antes en la puerta.

Varios se han lamentado de que Urkullu se haya reunido con Etxerat y todavía no lo haya hecho con ninguna asociación de víctimas. No públicamente, matizan desde lehendakaritza, sí en privado. Una vez más, en cualquier caso, los gestos.

De esas críticas, destaco la de COVITE: las familias de los presos no son responsables de los actos de estos, pero sí pueden influir en ellos. Cierto. Muchas veces, las familias son el único contacto no contaminado que tienen con la realidad y son el apoyo imprescindible si se plantean el reconocimiento crítico de su trayectoria. Supongo que es lo que busca el lehendakari: que les digan a los suyos que se muevan. Pero con Etxerat, que no recoge en sus informes a los presos de la vía Nanclares, lo tiene difícil.