La oposición deja sola a Botella en su intento de prohibir manifestaciones
PSOE, Izquierda Unida y UPyD no apoyan la moción de la alcaldesa para alejar las protestas fuera del centro de la capital
PSOE, IU y UPyD no han apoyado este jueves en el Pleno del Ayuntamiento de Madrid el deseo de la alcaldesa, Ana Botella, materializado en una declaración institucional, de negociar con la delegación del Gobierno una ordenación, en palabras de la regidora, de las manifestaciones que tienen lugar en la ciudad.
Ninguno de los tres grupos ha votado a favor de la propuesta del PP que recoge esa petición a la Delegación del Gobierno, que de todas formas ha salido adelante con los votos de la mayoría que respalda al gobierno municipal.
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Además, ha sido aprobada con los votos del PP y de UPyD otra propuesta de declaración que presentó este último grupo con anterioridad para, como también hacía la del PP, condenar lo sucedido y reconocer la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE).
En declaraciones previas a los medios de comunicación antes del debate en Pleno, el portavoz socialista, Jaime Lissavetzky, ha dicho que su grupo sí habría apoyado una declaración de condena de los sucesos ocurridos en el centro de Madrid tras las Marchas de la Dignidad del pasado sábado, pero no lo que ha calificado de "máximo ejemplo de romper el espíritu de la transición" por parte del PP.
Lissavetzky no cree "razonable" que se presente como una declaración institucional algo que a su juicio no es más que un intento de "limitar el derecho fundamental de manifestación" y lo relaciona con la "jaula de grillos" que considera que tiene formada el PP en Madrid en medio de "un debate entre candidatos".
Lo que quiere el PSOE es que se condene la violencia, que se aclaren los hechos que ocurrieron, que se identifique a los que causaron los destrozos y que los paguen, que comparezca el director general de la Policía en el Congreso y que se investigue si ha habido descoordinación. Además, ha revelado que su grupo está valorando posibilidad de pedir una reunión urgente del Consejo Local de Seguridad para abordar lo ocurrido.
El portavoz de IU, Ángel Pérez, ha dicho que su grupo condena la violencia y lamenta que haya habido heridos, "tanto policías como ciudadanos", pero cree que la actuación de la policía "no fue correcta" porque "se cargó contra ciudadanos pacíficos cuando todavía se estaba leyendo el manifiesto". Pérez ha criticado que Botella "se descuelgue con una pequeña ambición que es tratar de criminalizar la protesta", ha opinado que eso es "reírse de la democracia" y ha manifestado que "si a lo que se va es a perseguir las libertades, las libertades acabarán contra quien las persiga".
A su vez, el portavoz de UPyD, David Ortega, ha declarado que la propuesta de la alcaldesa "no se puede hacer" porque no tiene cabida en la legislación y "no tiene sentido". Ortega ha diferenciado entre el "legítimo derecho" de los ciudadanos a manifestarse; la actuación de las FCSE, cuya actuación ha generado "dudas" el pasado fin de semana; y el motivo de la declaración institucional: que los ciudadanos "no tuvieron derecho a la libre circulación y a la integridad física".
En respuesta a todos ellos, como también había hecho en declaraciones previas a la prensa, el portavoz del PP y delegado de Seguridad, Enrique Núñez, ha defendido que "el derecho de manifestación no es un derecho ilimitado y total" sino que hay otros como el derecho a la movilidad.
Lo que quiere el PP, ha explicado, es sentarse a dialogar con la Delegación del Gobierno para "estudiar algunos espacios" de la ciudad donde se puedan preservar esos otros derechos mientras se realizan las manifestaciones, aunque ha reconocido que "no es fácil".
Núñez ha negado ante los periodistas que haya algún problema de comunicación entre la alcaldesa y la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, y ha dicho que si ha sido ahora cuando Botella le ha enviado una carta para pedirle formalmente una reunión en la que abordar esta cuestión es porque "las cuestiones se plantean cuando hay que plantearlas".
"No hay ningún problema ni nada", ha garantizado Núñez, que ha insistido en que lo ocurrido el sábado fue "un antes y un después" en esta cuestión que hace necesario actuar.