Tomas Gómez: "Es un paripé, hace meses que saben que Eurovegas no venía"

Uno de los últimos requisitos del magnate Sheldon Adelson para implantar definitivamente su ciudad de casinos y hoteles ha terminado consiguiendo que el proyecto salte por los aires. Las Vegas Sands pedía, "como requisito innegociable", que se indemnizase a la empresa en caso de que, una vez instalado el macrocomplejo en España, hubiese algún cambio normativo que afectase al proyecto. Y el Gobierno ha tenido que decir que no.

Mientras que se esperaba a que el Gobierno central y el autonómico de la capital moviesen ficha para agradar al magnate, fueron muchas las voces que se despertaron en contra de Eurovegas.

Los supuestos puestos de trabajo que traería consigo y la gran inversión no han sido suficientes para asentar un proyecto que también pedía cambios en la legislatura. Al final hasta voces defensoras, como la de Esperanza Aguirre han tenido que reconocer que las peticiones del magnate eran muy elevadas.

Según ha explicado en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Soraya Sáenz de Santamaría, "las Vegas Sands ha puesto encima de la mesa nuevas condiciones para su inversión que no tienen encaje jurídico ni en el derecho español, ni en el derecho comunitario. Y por eso, la Comunidad de Madrid ha tenido que rechazar el proyecto".

Aguirre ha explicado, "un Gobierno solo se puede comprometer en democracia durante el tiempo que dura su legislatura, no se puede comprometer mucho más a delante" y los cambios que pedían en la legislatura los responsables de Eurovegas exigían esto. Indemnizaciones en caso de cambios.

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Esperanza Aguirre dice entender que se rechace Eurovegas pero lo lamenta. "Me hubiera encantado que no se hubiera dejado escapar el proyecto", "lo siento mucho por Alcorcón, por Madrid y por España", pero asegura que ella ya sabía que esto iba a ocurrir. Por ello no ha dudado en hacer afirmaciones como: "Como decía mi abuela, harta de acertar. Esto ha sido la comprobación de que yo tenía razón".

En el lado de la oposición, el líder de los socialistas madrileños, Tomas Gómez, ha defendido que el anuncio de rechazo de este viernes "es un paripé" porque "hace meses que saben que Eurovegas no venía a Madrid".

De hecho, ya se decía que la derrota de Madrid como candidata a los Juegos Olímpicos desilusionó a Adelson, quién empezó a pensar en otros emplazamientos. Sobre esta idea ha hablado Tomás Gómez afirmando que el Gobierno "hace meses que saben que el proyecto tiene su mirada puesta en Asia", en lugares como Vietnam. "Han dejado que se use Madrid como moneda de cambio".

La voz de la delegada del Gobierno en Madrid, lógicamente, ha sido más amable con el ejecutivo. Cristina Cifuentes ha dicho que "no se puede hacer una excepcionalidad permanente en la legislación para un proyecto", por lo que apoya lo aprobado. Aunque también ha dejado claro que lo que la gustaría es que "esos escollos" pudieran ser provisionales y que con ellos, el proyecto pudiera salir a delante.

Desde el punto de vista económico, la Confederación de Comercio de Madrid asegura que "el Gobierno ha dicho hasta aquí" a Eurovegas. Su presidente, Hilario Alfaro, ha asegurado en una entrevista en 'Hoy por Hoy Madrid' que "si el Gobierno ha tomado esta decisión, tendrá sus motivos". "Las Vegas Sands ha ido apretando las tuercas y ha llegado un momento en el que el Gobierno ha dicho hasta aquí". Además, añade que el Ejecutivo "tienen todo nuestro apoyo sin ningún tipo de fisura".

Y Jiménez Latorre, secretario de Estado de Economía, ha dicho que aunque la inversión que proponía el proyecto de hostelería y casinos de Eurovegas era buena "también depende de las condiciones". En este caso unas condiciones no asumibles al entrar en conflicto con la legislación vigente. Por ello, Jiménez Latorre ha declarado que "si hay condiciones que no son asumibles, el rechazo de Eurovegas no es ni buena ni mala noticia".