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El Ayuntamiento acusa a los bomberos de manipular a la opinión pública

En un comunicado muy duro, el Ayuntamiento de Madrid califica la acampada de los bomberos de bochonornosa y de un chantaje al equipo de gobierno

Los bomberos del ayuntamiento de Madrid han instalado un campamento en el centro de la ciudad para hacer más visible su protesta(DAVID CALLEJO)

Los bomberos del ayuntamiento de Madrid han instalado un campamento en el centro de la ciudad para hacer más visible su protesta

El sindicato CCOO, mayoritario en el cuerpo, ha organizado esta acampaña en el Paseo del Prado para intentar hacer visible su protesta. El Ayuntamiento cree que hay una clara intencionalidad política.

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El área de Movilidad y Seguridad expresa,a través de un comunicado, su "más contundente rechazo a una nueva maniobra de manipulación de la opinión pública madrileña por parte de los sindicatos convocantes". El ayuntamiento asegura que "en los últimos meses los bomberos han intentado transmitir a la población que la justificación de sus reivindicaciones no eran de carácter económico sino motivadas por las deficiencias que sufría el servicio ante la carencia de recursos humanos suficientes, instalaciones dignas y equipos adecuados". Y a pesar de que ya se ha llegado a "una serie de compromisos por la parte municipal que recogen ampliamente las citadas mejoras para el servicio, eso "no ha servido para evitar la continuidad de las acciones incívicas e irresponsables de CC.OO.".

Cree el ayuntamiento de Madrid que "el sindicato abochorna ahora a la ciudad montando un campamento en una de las zonas más emblemáticas y turísticas de la ciudad, pretendiendo chantajear a las autoridades municipales tanto por el lugar utilizado como por el momento electoral que a la sazón vive la capital. Incluso no tienen sonrojo en declarar públicamente que la solución al problema es una cuestión política".

Para el Consistorio, esto prueba que "el único y verdadero sustrato de las conflictivas acciones de los bomberos -pintadas de vehículos públicos, vandalización de instalaciones, persecución de autoridades municipales, boicoteo a tareas de formación, prevención y divulgación, etc.- no es otro que la demanda de más dinero y menos trabajo, pues sus exigencias pasan por rebajar su actual jornada de trabajo hasta los sesenta días anuales, es decir 305 días libres al año".

 
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