COVID persistente: sin tratamiento y sin unidades especializadas cinco años después
165.000 personas en la Comunitat Valenciana viven con esta enfermedad multisistémica, casi dos millones y medio en toda España

María García y José Saiz, portavoces de la Plataforma COVID Persistente de la Comunidad Valenciana, en Hoy por Hoy Alicante
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Alicante
Los pacientes de COVID persistente de la Comunitat Valenciana piden inversión en investigación, unidades especializadas y "actuar ya" para lograr una cura para su dolencia. También exigen que "no se olvide" a las 165.000 personas que se calcula que hay afectadas en nuestra comunidad.
Los enfermos de COVID persistente sufren patologías que afectan a distintas partes de su organismo, por eso reclaman, entre otras cuestiones, una mejor atención integral y denuncian que, ante la falta de unidades específicas, deben peregrinar de un especialista a otro.
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María García y José Saiz, son pacientes de COVID persistente y portavoces del colectivo COVID Persistente de la Comunidad Valenciana.
Con un hilo de voz, una de los muchos síntomas que sufre, María "está en un momento complicado". Por su parte, José sufre fatiga crónica y no duerme más de tres horas diarias. Estas son solo algunas de las consecuencias de haberse contagiado de COVID-19 con las que tienen que lidiar cada día las personas a las que se les ha cronificado la enfermedad, pero entre las dolencias más comunes también destacan dificultades respiratorias, dolores, problemas de concentración o perdida de gusto y olfato.
Falta seguimiento
La falta de asistencia y seguimiento sanitario, de investigación, de protección laboral y de cobertura social afecta, denuncian desde este colectivo, a 2,4 millones de personas, que se estima han desarrollado la enfermedad en España. Son más de 36 millones en Europa y unos 400 millones de afectados a nivel mundial, según un estudio liderado por Ziyad Al-Aly y publicado por la revista Nature.
No existe de momento un tratamiento para esta enfermedad "sistémica" y solo se consigue paliar algunos de los síntomas. Por eso reclaman la creación de unidades específicas que lleven un seguimiento integral de cada caso con especialistas coordinados porque ahora "peregrinan de un especialista a otro".
También han recordado que esta enfermedad puede afectar a cualquier persona da igual su edad, su clase social o nacionalidad. Una de cada diez personas que se reinfecta desarrollará COVID persistente.
Menores enfermos
Mención especial han hecho María García y José Saiz a los menores y adolescentes enfermos. Han insistido en "hay que seguir su evolución con especial atención" porque con estos síntomas las consecuencias en su vida, en un periodo especialmente sensible para el desarrollo físico, pero también social, pueden ser especialmente "dramáticas".
Y es que la COVID persistente conlleva aparejada lo que ellos denominan la "muerte social", y es que, además de la salud, en muchos casos, han perdido "trabajo, amistades, familia, derechos sociales..."
Cada día surgen nuevos casos, nos han recordado. Once asociaciones de pacientes de cinco países diferentes se han unido para reivindicar los derechos de los enfermos de COVID persistente coincidiendo con el 15 de marzo pasado, cuando se celebró el Día Internacional para la Concienciación y el Reconocimiento de esta dolencia.