Cuatro años de espera para el juicio por la presunta ocultación de bienes de Carlos Fabra ayudado por empresarios como Fernando Roig o Enrique Gimeno: los recursos de las partes impiden avanzar
La causa se abrió en 2017, en 2021 finalizó la instrucción y, desde entonces, el proceso está en una fase intermedia entre el cierre de las diligencias de investigación y la apertura de juicio oral
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El expresidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, en una imagen de archivo. / Radio Castellón (Radio Castellón)
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La causa por la que se investiga una presunta ocultación de bienes por parte del expresidente de la Diputación de Castellón, Carlos Fabra, ayudado supuestamente por empresarios como el presidente del Villarreal, Fernando Roig, o el presidente del Grupo Gimeno, Enrique Gimeno, lleva paralizada cerca de 4 años en una fase intermedia entre el fin de la instrucción y la apertura de juicio.
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Según ha podido saber Radio Castellón, el procedimiento se inició por denuncia de la Fiscalía en 2017. Las diligencias se mantuvieron bajo secreto sumarial desde ese momento hasta septiembre de 2020, momento en el que se realizaron registros y se permitió el acceso al procedimiento.
La instrucción siguió desarrollándose hasta abril de 2021. Desde entonces, la causa ha contado con hasta tres autos de procedimiento abreviado --o lo que es lo mismo, hasta tres escritos judiciales que consideraban que había pruebas necesarias para dar paso a la celebración del juicio--.
Esos autos han contado con múltiples recursos de las partes que han hecho que el proceso permanezca, a día de hoy, estancado en el mismo punto que en el que quedó en 2021.
Causa estancada durante 4 años
De esta forma, ya van 8 años de causa y casi la mitad del tiempo, los últimos 4 años, el proceso ha estado estancado entre el fin de la instrucción y el inicio de la fase de juicio oral, sin llegar a producirse el señalamiento. Ahora, según ha podido saber Radio Castellón, se ha resuelto el último recurso interpuesto aunque las partes todavía pueden volver a apelar.
Este es un caso que preocupa a la defensa de los acusados puesto que, en el caso de Fabra, se piden penas de alrededor de 11 años de prisión.