Caimanes en la L'Albufera de València: aparecen 'cocodrilos hinchables' en sus aguas para impedir la invasión de flamencos
Es la solución de los agricultores para impedir que estas aves destrocen los campos de arroz
Cocodrilo hinchable en l' Albufera de València / Cadena Ser
València
L'Albufera de València es un parque natural protegido, que según la página web de la Generalitat tiene su origen miles de años atrás, cuando un golfo marino que se extendía entre las desembocaduras de los ríos Túria y Xùquer quedó, primero, aislado del mar Mediterráneo y, poco a poco, quedó parcialmente rellenado con los aportes sedimentarios de los dos ríos.
Dentro de la barra arenosa formada quedó una gran laguna salobre que, a medida que se colmataba, iba reduciendo progresivamente su superficie y conformando una extensa zona de marjal. A partir del S. XV, con la puesta en escena del cultivo del arroz, tienen lugar dos cambios fundamentales inducidos por el hombre: la dulcificación del sistema palustre y una aceleración del aterramiento del marjal primitivo, a fin de obtener mayor y mejor superficie cultivable.
El arroz, es uno de los usos tradicionales más reciente (S.XV), aunque el cultivo fue introducido por los árabes hace ya más de 800 años. El cultivo tiene una gran importancia económica y medioambiental. A la importante labor como filtro verde, ya que depura el agua de las 14.000 hectáreas que rodean la laguna, se une la de ser zona de refugio y despensa de las aves del parque natural, gracias a la considerable población de invertebrados acuáticos y pequeños macrófitos que sirven de alimento a estas aves, y que han desaparecido en l'Albufera.
Destrozos causados por los flamencos
Estos campos de arroz son fundamentales para la gastronomía valenciana y para economía de los pueblos ribereños que ven con preocupación como la llegada de los flamencos que se posan en los campos causa "destrozos" que ponen en peligro las cosechas.
Según Nando Durá de la Unió Llauradora en declaraciones a la SER destaca que la temporada pasada, fueron 13.000 los flamencos que acudieron a la zona causaron graves daños y en prevención se ha recurrido a la imaginación.
Nando Durá cree que con los flamencos más vale prevenir que curar
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Así en varios campos de Cullera y de Sueca, se han puesto " cocodrilos hinchables de plástico" para asustar a estas aves. Los campos están en un momento crítico porque se han inundado para la siembra y ahora el arroz está punteando sobre el agua y comienza a aparecer el color verde tan atractivo para las aves".
De momento los flamencos no han llegado a l'Albufera pero nunca está de más prevenir que curar.
El pasado mes de diciembre, l'Albufera registro una llegada masiva de Flamencos, que ya hizo saltar las alarmas en las organizaciones agrarias.
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