La adicción a las criptomonedas podría convertirse en un problema en la Comunitat Valenciana si no se regula su acceso

València

La adicción a las criptomonedas podría convertirse en un problema en la Comunitat Valenciana si no se regula su acceso y se ponen controles para evitar que los menores de edad puedan comprar y vender monedas de este tipo. Los centros espcializados en adicciones ya han empezado a tratar a algunas personas adictas a la compraventa de criptomonedas y, aunque todavía son menos que los adictos a apuestas en línea, los expertos muestran su preocupación por la facilidad de acceso a este tipo de divisas. Según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, el 11 por ciento de los inversores en criptomonedas en España son valencianos y el perfil corresponde al de un hombre de entre 25 y 44 años.

Son personas que, además, hacen un uso intensivo de las redes sociales y los teléfonos móviles y tienen problemas de descanso, ya que están continuamente comprobando las cotizaciones de las criptomonedas. Consuelo Tomás, directora del Instituto Valenciano de Ludopatía, que es el primer centro especializado en adicción a criptomonedas, asegura que cada vez atienden a más personas, y este tipo de inversión se ha convertido en un problema grave, igual que otro tipo de ludopatía. Detalla que los adictos a las criptomonedas arriesgan más dinero cuando consiguen beneficios, pero no asumen las pérdidas y quieren seguir invirtiendo. Tomás explica que los adictos acaban perdiendo el control y las consecuencias son físicas y psicológicas.

Mucha permisividad sobre criptomonedas

El Instituto Valenciano de Ludopatía ha comprobado que detrás de este aumento de la adicción a las criptomonedas está la elevada permisividad que hay en la sociedad sobre este tipo de inversión. Consuelo Tomás reclama más concienciación para que los jóvenes sean conscientes del peligro ya que, según ella, muchas veces son considerados como personas inteligentes por invertir en criptomonedas. Asegura que este problema se debería incluir en los planes contra la ludopatía que realizan las administraciones públicas.

Según el informe de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia sobre las criptomonedas, el 40 por ciento de la población considera que este tema está regulado por ley, aunque no es así, y casi el 30 por ciento piensan que tienen los mismos riesgos que otras inversiones.

La asociación Vida Libre, que atiende también a personas con adicciones no tóxicas, también ha empezado a recibir pacientes adictos a las criptomonedas, aunque aclaran que todavía son pocos en relación al resto de adicciones. Sí que alertan de que la falta de regulación puede suponer un problema grave.

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Más regulación

José Antonio Hurtado, terapeuta de la asociación Vida Libre, pide una regulación europea en torno a las criptomonedas que permita que los menores de edad no puedan acceder a ellas y que tamopoco lo hagan las personas que ya tienen otro tipo de adicciones y que están inscritas en los registros de autoexcluidos.

En todo caso, desde Vida Libre alertan de que las adicciones que más deben preocupar son las de las apuestas deportivas, que siguen en auge en la Comunitat Valenciana, y que afectan sobre todo a hombres jóvenes, que gastan el dinero en máquinas que pueden encontrar en bares o centros comerciales.

En ese sentido, José Antonio Hurtado pide que se controle más la publicidad que hay en internet, ya que aunque en televisión ahora esté prohibida publicitar apuestas en línea o criptomonedas, en redes sociales los jóvenes reciben un auténtico bombardeo de anuncios sobre inversiones en las que se arriesgan a perder el dinero.

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