Juzgan a la asociación feminista Subversives por la aparición de pintadas de la cara de Abascal con un tiro en la frente
Vox pide para la acusada tres años de cárcel para la acusada por un delito de odio, pero la Fiscalía rechaza la petición por falta de pruebas
![](https://cadenaser.com/resizer/v2/OYUC3IJAIBBIJNPUOYM5U7RV5M.jpeg?auth=aff66a11f96fbf84790ea9e441ff0b37f081d8d329469dfec5202478b6ead7d2&quality=70&width=650&height=487&smart=true)
![](https://cadenaser.com/resizer/v2/OYUC3IJAIBBIJNPUOYM5U7RV5M.jpeg?auth=aff66a11f96fbf84790ea9e441ff0b37f081d8d329469dfec5202478b6ead7d2)
Castelló
El Juzgado de lo Penal nº 3 de Castellón ha celebrado hoy el juicio contra la asociación feminista Subversives tras una denuncia de Vox por la aparición de un muñeco con la cara de Santiago Abascal en el que se simulaba un tiro en la frente del presidente del partido.
Estaba previsto que el líder nacional de Vox declarara de forma telemática por esta causa, en la que la formación de ultraderecha interpuso una querella criminal a la organización feminista de Castellón, a cuyas activistas se les atribuye los hechos, pero finalmente no ha intervenido.
La jueza, preguntada por la abogada de la defensa, sobre la declaración de Abascal prevista para hoy, ha asegurado que no intervendría “porque nadie se lo ha pedido”. Sí que ha declarado la acusada, que ha negado ser la autora de las pintadas y ha afirmado no tener constancia de que la asociación feminista estuviera detrás de los hechos.
Por su parte, el Ministerio Fiscal señala que “no hay incitación directa al odio” y que "no hay pruebas de que la acusada haya sido autora material de las pintadas". Rechaza, por tanto, que se le imponga la condena de tres años por delito de odio que pide la acusación, además de la suspensión de la actividad de la organización por cinco años, así como la clausura de sus locales y establecimientos y la inhabilitación para obtener subvenciones.
La defensa se acoge a la falta de pruebas aportadas que señalen a la acusada y la acusación ha pedido al juez que, si no se contempla el delito de odio, se contemple un delito de amenazas con agravante de amenazas por cuestiones ideológicas.
Por su parte, otros miembros de Subversives se han concentrado a las puertas del juzgado de la Audiencia Provincial de Castellón bajo proclamas como "abascal al bancal”.