La Unión de Consumidores pide más controles sobre los organizadores de grandes eventos para que las cancelaciones no cuesten dinero a los clientes

València

La Unión de Consumidores insta a las administraciones a aumentar los controles sobre los organizadores de eventos, sobre todo conciertos, para evitar los perjuicios a los compradores de entradas en caso de cancelación como ocurrio con el Diversity en València el año pasado. Además, recomienda comprar las localidades en páginas oficiales para evitar fraudes.

El verano es epoca de festivales, de hecho está en marcha el FIB de Benicàssim que reúne 180.000 personas hasta este domingo por la noche que termina. Todas las entradas están vendidas desde hace tiempo. Y esa es, precisamente, una de las situaciones en las que se fija la Unión de Consumidores para reclamar una mayor protección para los que compran entradas.

Y es que quien quiere ir al festival debe adelantar el dinero mucho antes de la celebración del evento, porque se tienen que pedir permisos o buscar proveedores. Sin embargo, si se produce la cancelación del evento de manera unilateral por parte de la organización el comprador de la entrada tiene muchas dificultades para recuperar el dinero. Lo explica Francisco Rodríguez, que es asesor jurídico de la Unión de Consumidores.

Pide responsabilidad a los consumidores

Francisco Rodríguez también apela a la responsabilidad de los consumidores a la hora de comprar las entradas. Porque siempre es mejor comprarlas en los canales oficiales. Si se compran en plataformas de segunda mano los problemas pueden ser numerosos.

Rodríguez insiste en que las administraciones deben controlar o vigilar de alguna manera a las empresas organizadoras de eventos, porque cancelaciones como la que se produjo el año pasado del festival Diversity, que se iba a celebrar en julio de 2022 en la Marina de València, perjudican y mucho la imagen de la Comunitat Valenciana, según la Unión de consumidores.

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