Martinón-Torres relata el "gigantesco reto logístico" que ha supuesto traer a Alicante "la exposición de mayor calibre en Europa en los últimos años"
El catedrático de Arqueología de la Universidad de Cambridge y comisario de la exposición 'El legado de las dinastías Qin y Han, China. Los guerreros de Xi'an' ha conversado con Carlos Arcaya en Hoy por Hoy Alicante
Marcos Martinón-Torres, comisario de la exposición "Los guerreros de Xi'an", en Hoy por Hoy Alicante
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Alicante
El prestigioso arqueólogo español Marcos Martinón-Torres, ha relatado en Hoy por Hoy Alicante el "gigantesco reto logístico" que supone traer a la ciudad la que considera "la exposición de mayor calibre en Europa en los últimos años": El legado de las dinastías Qin y Han, China. Los guerreros de Xi'an.
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El catedrático de la Universidad de Cambridge, una autoridad mundial en la investigación sobre estas extraordinarias esculturas de terracota, se confiesa "eufórico" por la llegada de los guerreros a Alicante. Martinón-Torres ha elogiado la enorme valía de los 200 trabajadores del MARQ y el gran esfuerzo que ha supuesto "encajar los calendarios" entre ambos gobiernos -con una pandemia de por medio desde que se planificó el evento- y lograr que después de tres años los guerreros llegasen, por fin, a la ciudad.
El comisario destaca de una exposición que cubre mil años en la historia de China su capacidad para hacer entrar al espectador en un mundo de ultratumba, pero también de trasladar al espectador de hoy la tecnología del pasado, a través de "muchos puntos zoom", dice, sobre los que se pone la lupa en su visita.
Una civilización que se conectaba con Occidente a través de la ruta de la seda y que en esta muestra arranca 500 años antes del nacimiento del emperador y continúa hasta la dinastía Han, a través de unos 150 objetos cuidadosamente seleccionados de nueve museos diferentes.
El legado de las dinastías Qin y Han, China. Los guerreros de Xi'an / Manuel Lorenzo
El legado de las dinastías Qin y Han, China. Los guerreros de Xi'an / Manuel Lorenzo
Los guerreros, explica, son "figuras muy importantes porque materializan una manera de entender la muerte y el más allá". Las figuras de terracota que forman parte del mausoleo del primer emperador defienden una ciudad funeraria. En su interior, hay fosas con sirvientes, concubinas, malabaristas, carruajes, aves en acequias y un mundo creado para vivir para siempre, donde se pone en valor el recogimiento.
Por esa razón, introducirse en un mundo de muertos es también un privilegio, señala, que implica afrontar con reverencia no solo el mundo funerario, sino también la artesanía y la tecnología. Y construir una narrativa "que sea relevante para los distintos tipos de audiencia" y dé a conocer a un emperador -cuando nadie sabía lo que era un Imperio-. Una figura que logró que todo ese gran mundo disperso, con hasta seis millones de súbitos en 60 millones de metros cuadrados, consolidase leyes, religión, pesos, medidas e idiomas. Insiste el comisario Marcos Martinón-Torres: "No ha habido una exposición de este calibre en Europa ni más rica".
Marcos Martinón-Torres, catedrático de Arqueología de la Universidad de Cambridge y comisario de la exposición 'El legado de las dinastías Qin y Han, China. Los guerreros de Xi'an' / Silvia Cárceles Pozo
Marcos Martinón-Torres, catedrático de Arqueología de la Universidad de Cambridge y comisario de la exposición 'El legado de las dinastías Qin y Han, China. Los guerreros de Xi'an' / Silvia Cárceles Pozo
La fecha elegida para la inauguración de la muestra coincide con el día previo a la efeméride que conmemora la fecha en la que unos campesinos descubrieron los guerreros de terracota el 29 marzo de 1974, el día en el que empezó todo.
