Más Madrid llevará al Defensor del Pueblo la desprotección de los usuarios de las redes sociales frente a los “discursos de odio”
Los cambios en la moderación de contenidos de X y Meta y la “dejación de funciones” de las autoridades españolas ponen en riesgo los derechos fundamentales de sus usuarios, según su portavoz, Manuela Bergerot
Madrid
Más Madrid elevará una queja al Defensor del Pueblo por la vulneración de los derechos fundamentales de los usuarios de plataformas como X, WhatsApp, Instagram, Facebook o Threads; a raíz de los cambios en las políticas de moderación de contenidos puestos en marcha o anunciados por sus empresas matrices –X y Meta-, coincidiendo con el regreso este lunes de Donald Trump a la Casa Blanca.
Esas modificaciones “no suponen una simple permisividad en las expresiones que pudiera ampararse en la libertad de expresión, sino que se realiza una clara y obvia discriminación de las personas respecto al género, a su identidad y a su orientación sexual en referencia a la transexualidad y la homosexualidad”, denuncia el partido regionalista en su escrito, al que ha tenido acceso la SER.
En su queja, Más Madrid pone el foco especialmente sobre los cambios anunciados por Meta, a la que atribuye más de 35millones de usuarios en España. Especialmente, en las salvedades que introduce a los contenidos que considera inadmisibles en sus redes sociales.
En lo relativo a los insultos, esas normas condenan las acusaciones referentes a la cobardía, pero admiten tachar de enfermos mentales o anormales a homosexuales y transexuales: “Sí permitimos las acusaciones de enfermedad mental o anormalidad cuando se basan en el género o la orientación sexual, dado el discurso político y religioso sobre transexualidad y homosexualidad, y el uso habitual no grave de palabras como raro”, rezan sus normas de comportamiento.
“No vamos a dejar que dos multimillonarios arrogantes impongan las normas del debate público en España”, defiende Manuela Bergerot, portavoz de Más Madrid en la Asamblea, en referencia a Elon Musk y Mark Zuckerberg, propietarios respectivamente de los gigantes X y Meta. En la formación regionalista están convencidos de que la política de moderación de contenidos que impulsan ambos magnates vulnera el artículo 14 de la Constitución Española -ese que reza que “los españoles son iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna [...]”- y la doctrina establecida al respecto por el Tribunal Constitucional desde 1978.
Pero, ¿qué puede hacer el Defensor del Pueblo contra dos gigantes tecnológicos? “No podemos dejar que una alianza entre políticos fascistas y empresarios ultrarricos hagan en Europa lo que están haciendo en Estados Unidos”, insiste Bergerot, que pide a Ángel Gabilondo que al menos que investigue estas prácticas. La Comisión Europea ya ha movido ficha con X, a la que investiga desde diciembre de 2023, acusada de violar el reglamento europeo de servicios digitales.
Más Madrid también reclama al Defensor del Pueblo que pegue un tirón de orejas a la Administración General del Estado por "dejación de funciones”. La queja de la formación madrileña recuerda que España cuenta con una Ley Integral para la Igualdad de Trato y la No Discriminación desde 2022, aunque las autoridades no la han desarrollado todavía plenamente. Así, por ejemplo, lamenta que no esté operativa aún la Autoridad Independiente para la Igualdad de Trato y la No Discriminación, a la que la norma atribuye la competencia de “iniciar, de oficio o instancia de terceros, investigaciones sobre la existencia de posibles situaciones de discriminación que revistan una especial gravedad o relevancia”.
Otro ejemplo de esa discriminación de Meta, que Más Madrid incorpora a su escrito, es su regulación sobre los comentarios que incitan a la exclusión económica, que describe en sus normas de uso como aquellos orientados a “negar el acceso a prestaciones económicas y limitar la participación en el mercado laboral”; aunque inmediatamente vuelve a admitir aquellos dirigidos a personas en función de su género, identidad u orientación sexual.
“Sí permitimos el contenido que abogue por las limitaciones de acceso a puestos de trabajo en cuerpos militares, fuerzas y cuerpos de seguridad, y el sector educativo en función del género”, afirma Meta en su código de conducta; que también abre la puerta a ese contenido discriminatorio “en función de la orientación sexual, cuando este [el contenido] se basa en creencias religiosas”, detalla.
Ante afirmaciones como esas -esgrime Más Madrid-, “es imperativa la defensa de los principios básicos de igualdad y no discriminación que nos rigen como ciudadanos de un Estado de derecho”.
Javier Alonso
Periodista. Licenciado por la Facultad de Ciencias de la Información de la Univesidad Complutense de...