"Eso no es un accidente, es una negligencia muy grave", denuncian los padres de la niña ahogada en verano en un colegio en Alcorcón
Los hechos ocurrieron el 21 de julio pasado, cuando la menor estaba realizando una actividad lectiva en la piscina de un colegio privado situado en la urbanización Campodón
Alcorcón
Los padres de la niña de cuatro años que falleció en julio pasado tras ahogarse en la piscina de un colegio privado de Alcorcón, donde aprendía a nadar junto a sus compañeros, insisten en que "no fue un accidente", sino que fue "una grave negligencia" por parte de los supervisores.
Los hechos ocurrieron el 21 de julio pasado, cuando la menor estaba realizando una actividad lectiva en la piscina de un colegio privado de Alcorcón situado en la urbanización Campodón, supuestamente supervisada por un socorrista, que cuando se percató, la niña ya estaba inconsciente.
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Los efectivos del SUMMA 112 trasladaron urgentemente en helicóptero al Hospital 12 de Octubre de Madrid con un pronóstico grave, después de que los sanitarios lograran revertirla con maniobras de reanimación avanzada, aunque finalmente acabó falleciendo dos días después en el hospital.
Después de cinco meses de aquella tragedia que acabó con el fallecimiento de la niña, sus padres han hecho público un comunicado en el que, además de expresar el "dolor profundo" por la pérdida de su hija, reclaman justicia ante lo que consideran "negligencia y falta de transparencia del colegio".
"Como padres sentimos el dolor más inmenso que puede sentir cualquier persona humana al perder a un hijo, pero a ese dolor hay que añadirle la mala gestión, la poca humanidad, el poco respeto y las pocas explicaciones que el colegio ha mostrado", arrancan los padres el comunicado, al que ha tenido acceso Efe.
Los padres insisten en que hacen público este comunicado ya que "se han vertido informaciones que no son correctas", por lo que sienten la necesidad de aclararlo: "Lo que no podemos es ocultar más la verdad y permitir que se estén extendiendo bulos que no son ciertos", añaden en referencia al colegio.
"Solamente se han dedicado a limpiar su imagen públicamente que es lo que más les importa. Haciendo publicaciones vacías en redes sociales cuando de forma privada muestran otra cara", reiteran, criticando la diferencia entre las publicaciones oficiales del colegio en redes sociales y la falta de comunicación en privado.
A continuación hacen un relato sobre lo que sucedió aquel 21 de julio, lo que consideran una negligencia: "Noelia no sufrió un accidente, ni se dio ningún golpe, ni había colchonetas; a Noelia no la cuidaron. Nuestra niña pasó muchos minutos debajo del agua y esa es la verdad".
Por ello, insisten en que "eso no es un accidente, es una negligencia muy grave", ya que "nadie se dio cuenta durante bastantes y largos minutos que nuestra niña estaba ahí abajo".
"¿Qué hacían entonces los que debían estar vigilando? Si hubieran hecho su trabajo nada de esto habría pasado", lamentan, recalcando que las personas implicadas en el suceso "están imputadas por el Juzgado de Instrucción por un delito de homicidio por imprudencia grave".
Sin embargo, según denuncian los padres, estas personas "siguen trabajando en el mismo sitio, en el colegio Villalkor, y no se ha tomado ninguna medida al respecto", lo que consideran un motivo de indignación y alarma.
"Estas personas se enfrentan a una posible responsabilidad penal al no estar en el lugar que les correspondía por su cargo, lo que motivó el fatal desenlace. Pero, ahí siguen, trabajando con menores", reiteran en su comunicado.
Con un procedimiento penal en marcha por esta posible negligencia, la familia espera que "se haga Justicia" y se determinen las responsabilidades pertinentes, criticando además las actuaciones del centro y los cooperativistas "al intentar hacer como si nada hubiera pasado".
"¿Hay algo más grave que la pérdida de la vida de una niña en un centro educativo por una imprudencia perfectamente evitable?", concluyen, señalando que, además del procedimiento penal, su exigencia de justicia es también un acto de memoria hacia Noelia, quien "un día se fue al cole y ya nunca volvió a casa".