La población del buitre negro en El Paular asciende a los 250 ejemplares con dos nuevos miembros
Con la liberación de estos dos ejemplares, la población de buitres negros establecida allí a lo largo de 2024 asciende a los 250 buitres, suponiendo también una duplicación durante los últimos doce años
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Rascafría
La finca de El Paular, ubicada en el municipio de Rascafría, cuenta con dos nuevos ejemplares de buitre negro, lo que supone un crecimiento del número de ejemplares hasta los 250 alcanzados a lo largo del presente año. Asimismo, este crecimiento forma parte de una duplicación de estas aves, desarrollada por parte de la Comunidad de Madrid, en los últimos doce años.
Se trata de dos ejemplares que fueron encontrados la pasada primavera, cuando eran polluelos. Fueron localizados por los Agentes Forestales y llevados al Centro de Recuperación de Animales Silvestres (CRAS) y, recientemente, ya con siete meses de edad y capacidad para ser autónomos, han sido liberados en la finca, un lugar considerado refugio de fauna, adquirido por el Ejecutivo autonómico en octubre de 2023 con la intención de incluirlo en el Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama (PNSG), ya que forma parte de la Zona Periférica de Protección del Parque.
En cuanto al incremento de la población de estas aves durante los últimos años, ha sido posible gracias al cuidado de los espacios, la aportación de alimentación suplementaria, la vigilancia de sus posibles amenazas y, sobre todo, la recuperación de las crías que caen del nido.
Los buitres negros alcanzan una longitud de 280 centímetros con las alas abiertas. Se trata de una de las especies más amenazadas de Europa y se localiza en la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) del Alto Lozoya (donde se encuentra la cuarta mayor colonia española) y en la ZEPA Encinares del río Alberche y río Cofio. Al contrario que otros buitres como el leonado, que se instala en rocas, este elige pinos alejados de núcleos urbanos y con poco tránsito de personas.
Expertos en biodiversidad del Gobierno autonómico realizan un minucioso seguimiento de los asentamientos, junto a la Sociedad Española de Ornitología. Gracias a ello, en 2024 se han registrado más de 200 anidamientos alrededor de Peñalara y alrededor de 50 fuera del área de Rascafría.
Por otro lado, junto al buitre negro, otras aves también han mejorado su presencia en la región. La cigüeña negra ha aumentado su población reproductora en la última década, pasando de cinco parejas en 2013 a ocho en 2024. De la blanca, se tiene constancia de más de 2.300 nidos. El águila imperial ibérica ha subido de 30 parejas en 2008 a 101, mientras que del buitre leonado se estima que ya hay más de 600.