Benito Milano, el fisio de Sanse que ha formado parte del equipo médico de la selección en esta Eurocopa

San Sebastián de los Reyes

Pasada la vorágine del triunfo de la selección española de fútbol en la Eurocopa, Benito Milano, continua con su trabajo como responsable de fisioterapia en el polideportivo la Dehesa Boyal de San Sebastián de los Reyes, como si nada hubiera pasado, pero no es así. Él es uno de los que ha contribuido, en la sombra, a que los jugadores que saltaban al campo estuvieran en perfecto estado físico para darlo todo.

Milano trabaja con la Federación Española de Fútbol desde hace 21 años y ha prestado sus servicios a las categorías inferiores, estando con selecciones masculinas, femeninas, fútbol 11, fútbol sala…, en mundiales y europeos. Desde hace cinco trabaja dentro del equipo médico que atiende a la selección española absoluta cada vez que les convocan. En este campeonato este equipo estaba integrado por 2 médicos, 6 fisioterapeutas, 1 nutricionista, 1 podólogo, 1 psicólogo y 1 readactador. Todos pendientes las 24h de las molestias y problemas de los jugadores para que estuvieran todos a disposición del entrenador en una competición tan exigente como al Eurocopa, con muchos partidos en poco tiempo.

Su participación en esta competición, que le ha convertido también a él en campeón de Europa, le supone “orgullo y la sensación de haber participado y ayudado a conseguir el título”, cuenta en SER Madrid Norte. Su papel, como el del resto del equipo médico es estar siempre atentos a cualquier golpe o contusión para actuar rápidamente y que el problema no vaya a más. “Es raro que los jugadores de este nivel estén al 100%, sin ninguna molestia en frío, aunque luego cuando calientan todo se pasa”, indica.

El trabajo diario en la concentración

Milano explica que con 26 jugadores se necesitaba “un número importante de fisios para tenderles constantemente. No tenemos mucho tiempo libre, el día a día de la concentración es estricto, con horario para levantarnos y desayunar. Antes del calentamiento de un entrenamiento hay que estar ahí, porque algunos empiezan con el fisio en camilla, con movilidad para articular cadera, rodilla, tobillo, otros quieren calentar algún músculo, algunos hacen entrenamiento individual con el preparador físico o readactador. Luego en el entrenamiento hay que estar atentos a golpes, contusiones, por si hay que poner rápido hielo, es necesario actuar rápidamente porque es mejor que si te esperas una hora, así es más efectivo y esto ayuda porque en un campeonato no hay tantos días de recuperación”.

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Hasta la comida, una hora y media aproximadamente, “aprovechamos para tratar a los que se han sobrecargado o han tenido una sensación rara. Luego cuentan con toda la tarde para seguir atendiéndoles y para ello utilizan todos los medios del hotel donde se alojan y la tecnología más avanzada de la que disponen como cámaras hiperbáricas de crioterapia, de bioestimulación, inducción electromagnética, pero sobre todo, “nuestros conocimientos y las manos que es lo que más utilizamos, lo más importante que tenemos”, asegura. Pero su trabajo no acaba aquí porque después de la cena y hasta las 12 de la noche, como hora límite, continúan trabajando con los jugadores que lo necesiten.

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En el caso de Morata, tras el golpe al terminar el partido de la semifinal, el jugado tuvo que ser atendido para descartar un problema mayor. “Hubo suerte que había imágenes y pudimos ver lo que pasó, a partir de ahí al vestuario, el médico explora, parece que es sólo una contusión y a partir de ahí poner hielo para evitar inflamación. Luego se revisa de nuevo en el hotel. Nosotros pendientes también de como evoluciona y a la mañana siguiente cuando se ve que fue solo una contusión, sin llegar a más, pues llega el alivio”.

Ahora, después de las alegrías, emociones y muchas celebraciones, Milano, retoma la tranquilidad de su trabajo día a día en el polideportivo de Sanse donde continúaa prestando sus servicios.