El Gobierno de Ayuso quiere limitar la protesta universitaria: los escraches serán sancionados

Madrid

En la Consejería de Educación quieren tener preparado un borrador de la nueva ley de Enseñanzas Superiores, Universidades y Ciencia este mes de julio y presentárselo a los rectores de los centros públicos y de los privados y al resto de la comunidad educativa. Un texto que tendrá un capítulo de sanciones para los escraches, la ocupación y los actos vandálicos, tal y como ha explicado el consejero de Educación en un desayuno informativo con la prensa para hacer balance del primer año de legislatura.

"Lo que buscamos es hacer sanciones de tipo institucional. Queremos asegurar que se mantiene, en primer lugar, el decoro y el respeto a la legalidad en los espacios universitarios, en los campus. No queremos que sucedan incidentes que impliquen, por ejemplo, ocupación de la vía pública u ocupación de espacios universitarios, que se impida el acceso de estudiantes a sus espacios universitarios. Garantizar que existe un marco jurídico regulador que permita afrontar este tipo de situaciones", explica el consejero Emilio Viciana.

Las sanciones serían económicas y se le impondrían a las universidades. según los planes que tienen en este momento en la Consejería de Educación. No explican por qué esa necesidad de sancionar los escraches, ni de dónde ha partido la idea aunque en la memoria están las protestas que hubo a principios del año pasado en la Complutense cuando se nombró a Ayuso alumna ilustre por haber estudiado en la Facultad de Ciencias de la Información. Entonces hubo controles para que solo pudieran pasar alumnos de esa facultad. Algunos de ellos protestaron por la entrega del premio a la presidenta madrileña y también hubo presencia de miembros de las juventudes del Partido Popular que desplegaron una pancarta de apoyo a Ayuso.

En la Consejería de Educación esperan tener lista la ley para finales de año y poderla presentar ante la Asamblea de Madrid. Incluiría también la "colaboración público privada", ha dicho el consejero, que supondría la "regulación" de las escuelas de negocio y las universidades privadas.

En la Consejería de Educación preparan también lo que llaman un "sello de colegios de infantil y primaria sin pantallas" para las familias que prefieren la enseñanza analógica, del lápiz y el papel, aunque aún es solo una idea que está por definir. Emilio Viciana recuerda que se va a continuar también con la bajada de ratios en las clases y que en septiembre se aplicará al tercer curso del segundo ciclo de Infantil y a segundo de la ESO.

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Sobre las negociaciones con los sindicatos para responder a la demanda de los docentes de bajar el horario lectivo. El consejero de Educación dice que continúa trabajando en hacer una propuesta para negociar volver a las 18 horas lectivas en Secundaria pero que no hay está sobre la mesa reducir el horario en Infantil y Primaria.

En cuanto al futuro de la Escuela Europea Acreditada, Emilio Viciana asegura que ya les han "escrito centros educativos" interesados y que tomarán la decisión "lo antes posible" tras desestimar el hacerla dentro del Ramiro de Maeztu donde, subraya el consejero, se siguen haciendo obras "porque van a mejorar" las instalaciones del centro.