El endemoniado Santuario de la Virgen de la Balma
Uno de enclaves más misteriosos, conocido por una leyenda con milagros, brujas y ‘malignes’
Enigmas y Misterios con Álvaro Martín: El endemoniado Santuario de la Virgen de la Balma
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Alcobendas
El mito se remonta al 1308, cuando un pastor manco sanó gracias a la Virgen de la Balma. Tras aparecerse al aldeano, la santísima le solicitó que construyese allí mismo una ermita. Como compensación a su esfuerzo y su fe, esta le devolvió su miembro amputado. También se habló de levitaciones, como la que al parecer experimentó el aragonés Mariano Oliver ante decenas de testigos.
Construido entre los siglos XVI y XVII, este santuario de estilo renacentista fue punto de peregrinación para supuestos endemoniados que buscaban una cura para su mal. Lo llamaron la lucha contra ‘Els Malignes’.
La mayoría de los endemoniados eran simplemente epilépticos, enfermos mentales o esquizofrénicos; los asistentes a los ritos en su mayor parte gente analfabeta, pobre, hambrienta, fácilmente manipulable e impresionable, un colectivo tremendamente supersticioso, al cual las «Brujas» y «Espiritistas», cuentistas, timadores y gente sin escrúpulos en su mayoría, aterrorizaban a los asistentes y les sacaban el poco dinero que tenían, todo ello dentro de un paisaje digno de la España más profunda, más cercano al delirio colectivo de una masa enfervorecida, que a la existencia real de fenómenos sobrenaturales.
Sobre este lugar hablamos esta semana en nuestro espacio de misterios con Álvaro Martín, que precisamente visitó este lugar hace pocas semanas, para poder contarnos en primera persona su experiencia.