El verano volverá a tener hoteles llenos (y más caros)
Hemos hablado con un vallisoletano que dirige un establecimiento para más de 1.000 huéspedes en la costa de Huelva

Un director de un hotel de costa nos explica cómo va a ser el verano de 2025
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Valladolid
Estos días estamos recordando lo que vivimos hace cinco años y cómo la pandemia nos cambió la vida. Tanto en aquel momento como después. Y una de las consecuencias que ha dejado el COVID ha sido la manera en la que disfrutamos de nuestro ocio. Hay que recordar que aquella primavera, cuando el virus hizo que tuviéramos que encerrarnos en casa, muchos ya tenían sus reservas para las vacaciones de Semana Santa y de verano ya cerradas. Hubo infinidad de cancelaciones y el verano de 2020 fue distinto. Los hoteles abrieron a medio gas, con medidas de distancia social y, sobre todo, con mucha inquietud y muchas dificultades para poder cuadrar sus números. Aquellos momentos de tanta duda, nos llevaron a pensar si las aglomeraciones se iban a acabar, si eso de juntarse en un bar, en un restaurante, o en la piscina de un hotel con vistas al mar se iba a repetir o si pasaría a la historia.
Lo que hemos comprobado, y hemos tardado menos de cinco años en darnos cuenta de eso, es que no sólo las aguas, ahora que tanto llueve, volvieron a su cauce si no que, quizá como nunca, muchos ciudadanos han decidido exprimir al máximo su tiempo libre. Y de eso dan cuenta los libros de reserva completos en muchos locales de restauración o el cartel de completo que cuelgan establecimientos hoteleros con semanas de antelación cuando se produce un puente o cuando nos acercamos a un período vacacional importante. Eso se comprueba también con las cifras de turistas que, en los últimos veranos han alcanzado número estratosféricos.
Así que, si bien la primavera todavía no ha llegado, muchos ya están pensando -o tienen ya pensado- donde van a veranear. Las playas, las zonas de costa de nuestro país siguen siendo el destino preferido. Y en uno de esos lugares vive y trabaja un vallisoletano que estos días reabre las puertas del hotel que dirige desde hace ya un par de años.
Hemos hablado en 'Hoy por Hoy Valladolid' con Javier García Galindo, que está al frente del Occidental Isla Cristina, en la localidad onubense del mismo nombre. En temporada alta, entre huéspedes y trabajadores, allí hay más de 1.300 personas. Más que la población normal de muchos pueblos de Castilla y León. Confirma que el gasto en ocio es una prioridad en muchos hogares. Este años los precios también subirán. Y apunta un incremento que rondará el ocho por ciento en las tarifas. Lo que se suma a los crecimientos que se han registrado en los últimos ejercicios. Pese a todo, ha explicado, los profesionales han certificado que "algo ha cambiado" después de superar el coronavirus.
Ese 'algo', díficil de explicar con palabras, es, según ha señalado García Galindo "una especie de deseo de aprovechar el tiempo libre al máximo" lo que supone que en muchas casas los presupuestos se elaboran para cubrir los "indispensables" pero con una partida reservada "para el veraneo".
Pese a ese incremento y, como acabamos de escuchar, las reservas para el verano ya se han empezado a cerrar. El sector está convencido de que las prioridades de gasto de las familias -en aquellos hogares donde es posible- han cambiado y, desde la pandemia, se prioriza el ocio a otras cuestiones.
Como Cervantes en el 'Quijote', García Galindo prefiere "no acordarme" de las semanas que siguieron al primer confinamiento. Había muchas dudas sobre el futuro y si, como muchos creían, "el encierro iba a ser cosa de dos semanas". No lo fue. Se tuvieron que aplicar expedientes de regulación de empleo y la reapertura, cuando empezó la desescalada, fue en condiciones inéditas. Buffets asistidos, mascarillas en las tumbonas y litros de gel hidroalcohólico a disposición de la clientela.
En ese momento, los informes que manejaba el sector hotelero apuntaban a que la normalidad completa no se recuperaía hasta 2023. En el caso de nuestro país, el éxito de las campañas de vacunación, el comportamiento de la ciudadanía y -también- la relevancia del sector turístico en el conjunto de la economía sumada a ese sentimiento intangible que pedía a gritos recuperar algunas costumbres, hicieron que el estío de 2022 adelantara ya la recuperación esperada.

Mario Alejandre
Cuenta lo que pasa en Valladolid y en Castilla y León desde que se incorporó a la SER, en el verano...