¡No hay quien pare al Tubos Aranda!
Los amarillos se coronan en Nava y suman ya 18 puntos dando un paso clave hacia la salvación. Pau Guitart nuevamente demuestra un nivel descomunal con paradas antológicas y tres goles desde su puerta
Equipo y afición desplazada en pleno viernes celebran el triunfo en Nava / Roberto Campillo
Aranda de Duero
Si los viernes gustan, así aún más. El Tubos Aranda Villa de Aranda se coronaba tras vencer en Nava y sumaba su tercera victoria consecutiva, logrando la friolera de 18 puntos a estas alturas de temporada y dando un paso muy importante de cara a la salvación. Cruce de goles y momentos entre los dos equipos que, con mucho trabajo, dejaron los dos puntos en el bus de vuelta.
La primera parte dejó compases de encuentro con muchas imprecisiones, sobre todo en los minutos iniciales. Las defensas y porterías ganaban enteros ante unos ataques que se chocaban una y otra vez. Hasta que apareció (como ante Cangas) Juan Tamayo con sus goles claves. Aranda comandaba el marcador, se hizo fuerte en defensa, y logró ventaja sobre su rival. Alegría en el sector visitante con más de seis decenas de seguidores ribereños en el Guerreros Naveros.
Juan Tamayo volvió a ser clave y desatascó el bloqueo inicial / Roberto Campillo
Juan Tamayo volvió a ser clave y desatascó el bloqueo inicial / Roberto Campillo
La situación era favorable. Quizá no tanto para Nava, que perdió a su primer efectivo de la noche con la lesión de Nolasco tras un choque fortuito con Santi Mosquera (luego llegaría la roja para Bonnano). Pero los naveros no decaían. Se quedaban a uno al filo del descanso. Y tras el tiempo muerto de Javi Márquez, se lograba el +2 nuevamente para llegar a vestuarios con fortaleza (12-14).
Regreso complejo
La segunda parte sin embargo no se iniciaba muy bien para los intereses amarillos (este viernes azules). Y es que aunque en un principio se pudo mantener la renta, una decisión muy rigurosa propició la exclusión de Dalmau, el gol de Nava, y tras un ataque fallido, el empate de Bonnano. Los segovianos dieron la vuelta al marcador (17-16) y Javi Márquez pidió tiempo muerto. Pero no había manera. Mateus Buda estaba inconmensurable en puerta y además de paradas dio hasta asistencia para los segovianos. Pero su talón de Aquiles estaba en la precipitación.
Reacción imparable
Por eso, y pese a tener desventajas de dos goles, los visitantes volvieron al partido e igualaban a falta de 10’ para el final con el gol de Enebral en los siete metros (muy acertado y confiado en prácticamente todos ellos) tras la exclusión de Pablo Herranz (21-21). Todo quedaba para el final. El Tubos Aranda se crece en los momentos más duros. Lo volvió a demostrar. Pero a San Pau no le valía solo con una docena de paradas. Se pasó a los goles desde casa ante el planteamiento local (23-25). Tiempo muerto de Álvaro Senovilla. Y cambio de portero.
El último mini-partido era el decisivo. Dejó nuevo siete metros que esta vez no entró. Y Nava se ponía a uno, pese a alguna mano más de Guitart (hasta las 15 llegó), logrando la igualada a falta de dos minutos. Ataque fallado de Nava ante la defensa ribereña, gol de Pau otra vez desde casa usando la catapulta y dos arriba. Ya estaba en el bolsillo. Nava recortó, pero el gol decisivo del ’capi’ Megías puso punto y final. Los dos puntos son arandinos. Y la salvación cada vez está más cerca.
Jorge Alvarado
Periodista. Responsable Digital de la SER en Aranda. Presentador de Hoy por Hoy Peñafiel y El Banquillo...
