Las leyes autonómicas protegen que el Museo de la Evolución Humana de Burgos exhiba restos humanos
El Ministerio de Cultura ha empezado a sustituir por réplicas los fósiles humanos en 16 museos estatales
Juan Luis Arsuaga con la 'Pelvis Elvis', una de las joyas del MEH / Javier Trueba
Burgos
La iniciativa del ministro de Cultura, Ernest Artazun, de sustituir por réplicas todos los fósiles humanos de los museos estatales, no afectará al Museo de la Evolución Humana de Burgos al ser de titularidad autonómica y es la exhibición de restos originales lo que hace que sea único en el mundo.
Esta semana se quiere agilizar la llamada Carta de Compromiso para el tratamiento ético de restos humanos, en 16 museos gestionados por la Dirección General de Patrimonio Cultural y Bellas Artes del Ministerio de Cultura.
El responsable de Comunicación del Museo de la Evolución Humana, Gonzalo de Santiago, explica que el objetivo que animó la puesta en marcha de este centro fue mostrar los hallazgos de los yacimientos de Atapuerca y, en particular, los restos excepcionales de origen humano.
Y añade que es precisamente estos restos, de especies, podría decirse pre-humanas, los que más aprecian los visitantes. Este es el principal valor de un museo como este, recalca De Santiago, y esto sería imposible sin la muestra de los fósiles originales, algo que lo hace único en el mundo.
El valor fundamental del Museo de la Evolución Humana, desde su inauguración, ha sido el de exhibir fósiles originales. El MEH nació como una apuesta de la Junta de Castilla y León y del equipo de investigaciones de Atapuerca, para crear una nueva infraestructura que mostrase los resultados de los yacimientos de Atapuerca.
De hecho, la construcción del museo responde a este objetivo y la museografía se diseñó y realizó bajo la premisa de exhibir fósiles originales de gran valor antropológico, explica Gonzalo de Santiago.
Por eso se exponen dentro de unas condiciones idóneas de luz y temperatura para su correcta conservación, con una monitorización informática de acuerdo a las nuevas tendencias museísticas avanzadas del siglo XXI.
Recuerda que el museo no es un osario de huesos, sino un museo vivo, que a partir de unos restos humanos fósiles, explica cómo nuestra especie ha llegado hasta aquí, explicando el proceso de hominización y cómo hemos sido el resultado de un éxito evolutivo, donde han tenido gran importancia aspectos como la cooperación, la solidaridad, la integración, etc.
El museo es además un museo científico y como tal pone en valor el resultado de las investigaciones en torno a los hallazgos de los yacimientos de Atapuerca y toda la información científica derivada de ese estudio de los fósiles ha sido puesta al servicio de la sociedad.
Asegura que desde el Departamento de Comunicación del museo "estamos muy atentos siempre a todas las opiniones de los visitantes, tanto en redes sociales como en plataformas como TripAdvisor, y precisamente esos visitantes destacan esa riqueza del museo, el hecho de que el visitante se enfrente cara a cara con los fósiles originales de Atapuerca, que además cabe recordar que son fósiles de especies diferentes a la nuestra, como es Antecesor o Neandertal.
En cuanto al marco legal, insiste en que, en este ámbito, rige la legislación, en Castilla y León rige la legislación autonómica.
En este sentido se aprobó en 2024 la Ley de Patrimonio Cultural, también lo regimos en la Ley de 2014 de Centros Museísticos de Castilla y León, por lo tanto, la normativa que rige es la autonómica, la legislación del Estado en este sector cuya norma básica es la Ley de Patrimonio Histórico Español de 1985 es supletoria en nuestra comunidad y se aplicaría en todo aquello que no esté legislado por la ley autonómica.
