La EDAR de La Aguilera queda en espera pese a las prisas de su alcalde pedáneo
Luciano Burgos había registrado hace una semana un escrito pidiendo dejar sin efecto su petición de paralizar los trámites por las dudas que el proyecto suscita entre los vecinos
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Imagen de archivo del alcalde pedáneo de La Aguilera, Luciano Burgos, invitado a participar en el pleno de Aranda de diciembre / Elena Lastra
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La Aguilera
La iniciativa de construir en La Aguilera una Depuradora de Aguas Residuales vuelve a ser objeto de polémica. Este proyecto, que contaba con el visto bueno del pleno del Ayuntamiento de Aranda para la firma de un convenio con SOMACyL para su construcción, había quedado provisionalmente suspendido por las quejas que había suscitado en esta pedanía el gasto que implicaría y determinadas dudas sobre su ubicación y dimensiones.
El alcalde pedáneo a mediados de enero había presentado, muy a su pesar, un escrito en la sede electrónica municipal solicitando la paralización de estos trámites, “a fin de poder estudiar y determinar adecuadamente los coste de financiación de dicha instalación”, señalaba en este documento. Sin embargo, hace una semana, el pasado lunes, Luciano Burgos registró otro en el que pedía al alcalde, Antonio Linaje, que deje sin efectos su petición anterior “y se proceda a realizar los trámites necesarios para que se reanuden los contactos con la Sociedad Pública de Infraestructuras y Medio Ambiente de Castilla y León, S.A., para la firma del contrato correspondiente”. En ese documento, le informa también al primer edil arandino que se está estudiando el convenio regulador de las condiciones de ambos entes, a fin de clarificar las competencias de cada uno.
El asunto ha ido esta mañana a comisión
La comisión de Contratación y Régimen Interior, que preside el propio Linaje, abordaba esta mañana este asunto, con la presencia de Luciano Burgos y del vocal de España Vaciada PCAS-Tierra Comunera, Esteban Herrero, que haciéndose eco de las opiniones contrarias de algunos vecinos, que consideran que hay otras prioridades en esta pedanía, dio la voz de alarma sobre el coste que esta iniciativa podría suponer para los escasos recursos de La Aguilera. Al término de la reunión, este último comentaba el empeño del alcalde pedáneo por firmar cuanto antes ese convenio para que el proyecto siga adelante, puesto que en el futuro La Aguilera podría tener que afrontar multas por no disponer de un sistema general de depuración de las aguas que vierte en el Gromejón. “El alcalde pedáneo está empeñado en que tiene que ir para adelante, porque si se paraliza la firma se pierde esta oportunidad y vamos a pagar multas, pero yo digo que hay que coger esas multas con pinzas, porque a las bodegas que vierten dos o tres igual no tiene un sistema depuración y hay que decirles que lo pongan”, argumenta Herrero, que insiste en que La Aguilera tiene una población de unos 180 habitantes, que en agosto puede llegar a aumentar hasta 250 como mucho, un volumen de población que considera mucho menor en relación a la envergadura de las instalaciones proyectadas.
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Escuchados los argumentos de ambos, el Ayuntamiento de Aranda parece dispuesto a no precipitarse en la firma de este convenio, aprovechando el margen de un año que hay para hacerlo desde que el pleno lo aprobó para estudiar los detalles del proyecto y plantearse la posibilidad de cambiar algunas cuestiones que no están del todo claras. “Veamos otros presupuestos, veamos otras circunstancias y si esto es cosa de Aranda, porque su Ayuntamiento es quien tiene asumidas las competencias de aguas, que haga un proyecto”, concluye este vocal.
Sin pausa pero sin prisa
Los representantes de la comisión de Contratación y Régimen Interior parecen coincidir en la necesidad de aprovechar este margen de un año para la firma del convenio que el pleno aceptó en diciembre con la abstención de Vox precisamente por algunas dudas. El concejal de Medio Ambiente explicaba este mediodía en Hoy por Hoy Aranda que hay varias cosas que pueden clarificarse antes de adoptar una decisión. “Hay que ver, primero si efectivamente el proyecto adecuado a nivel técnico, es decir, si cumple los requisitos mínimos que se están exigiendo, si la cantidad que se está pidiendo por esa depuradora es la adecuada y el coste que tiene que asumir el Ayuntamiento es aceptable, en este caso no estamos hablando del coste total, estamos hablando del 40% del coste total, que eso es lo que va a tener que pagar el Ayuntamiento de Aranda, y en tercer lugar si ese coste que asume el Ayuntamiento de Aranda se tiene que repercutir a La Aguilera o no”, detalla Carlos Medina.