“No es nada agradable lo que estoy viendo”: el mensaje de Benja Hernando desde el Alto Atlas

A 80-100 kilómetros de Marrakech, Benjamín Hernando nos habla desde el Alto Atlas. Esta cordillera que cruza parte de Marruecos experimenta bajísimas temperaturas. Y allí, en el epicentro del terremoto que se dio en septiembre de 2023 en El Hauz, se encuentra la cabeza visible de ASORIDO llevando ropa de abrigo y material escolar a una población que ha sufrido los efectos de ese seísmo y las posteriores lluvias.

Pese a que las carreteras han perdido su asfalto y se han convertido en caminos prácticamente sin acceso, Hernando ha llegado hasta allí no sin esfuerzos. Pero relata que la experiencia está mereciendo mucho la pena, pues el objetivo se va a cumplir. "Hemos traído ropa de abrigo, mantas, calzado y material escolar para los colegios y juguetes, que les hace a los niños una ilusión tremenda", refleja.

"Veo una zona devastada, ves pueblos hundidos completamente, familias que están viviendo de forma provisional en chabolas hechas con plásticos, chapas viejas o trozos de lona y maderas, y con temperaturas muy frías. Niños en escuelas provisionales, porque sus escuelas están devastadas. Prefiero no seguir contándolo", detalla Benja, que pretende regresar en unos cuatro días.

"Estoy en la recta final, muy contento, seguro de que va a salir todo bien, y sí que a la vuelta tengo idea de tomarme dos o tres días de relax en la que considero mi segunda ciudad, Larache, y allí quiero descansar un poco y hacer unas reparaciones en la furgoneta, que he tenido algunos problemas y como aquí la mecánica y la chapa y pintura es muy económica, aprovecharé", sentencia, en un audio que puede reproducirse ampliamente en el audio superior.