Fin de semana plagado de incidentes, de nuevo, en el fútbol base de Salamanca
Tras la jornada de reflexión establecida por los árbitros los incidentes han vuelto a varios partidos del fútbol base de la provincia
Campos de fútbol de Toñete, en Ciudad Rodrigo/Maps
Salamanca
El fútbol base de Salamanca ha vivido este fin de semana un nuevo episodio de intento de agresión a un árbitro en un partido de categoría juvenil, entre el Ciudad Rodrigo y el Villamayor, y que ha plasmado en el acta junto a insultos y amenazas del público.
Tan solo siete días después de la jornada de reflexión que detuvo la actividad deportiva por un fin de semana con una huelga de árbitros en las categorías inferiores de Salamanca, los incidentes se registraron en los campos municipales 'Toñete' de Ciudad Rodrigo.
Al comienzo de la segunda mitad el colegiado, de 20 años, pitó un penalti en contra del equipo local que desencadenó los acontecimientos, según ha explicado la agencia EFE y ha confirmado la SER al acceder al acta del encuentro.
A raíz de esta pena máxima, el portero del Ciudad Rodrigo comenzó a protestar y fue expulsado por doble amarilla, tras lo que se quitó la camiseta y se dirigió hacia el árbitro con actitud amenazante, por lo que sus compañeros le frenaron, lo que quedó reflejado en el acta.
La situación también produjo que los padres de algunos de los futbolistas del conjunto local comenzaran a insultar y amenazar al colegiado de forma grave, por lo que el árbitro llamó al delegado de campo y activó el protocolo de violencia verbal, que prevé que las personas que viertan esos insultos sean expulsadas del campo.
Amenazas al árbitro del partido
Estas personas, según el relato del árbitro, se quedaron detrás de la valla que delimita el campo y continuaron con los desprecios, por lo que el árbitro advirtió de que así no podía seguir el partido y que se retiraría al vestuario y avisaría a la Guardia Civil o la Policía Local si continuaban así.
Ante esta situación, el entrenador del Ciudad Rodrigo comenzó a gritar contra el árbitro, por lo que fue expulsado, y reaccionó de forma parecida el portero, al dirigirse también hacia el colegiado en actitud amenazante, por lo que fue sujetado por otras personas que se encontraban allí.
Finalmente el partido pudo culminar, según las mismas fuentes, pero en una situación de temor por lo ocurrido.
Otros episodios deleznables este fin de semana
En la Tercera división de juveniles, durante el partido entre el Villares de la Reina y el Hergar C, se produjo otro momento lamentable del fin de semana.
En el minuto 67 de partido hubo un enfrentamiento en la grada entre un grupo en el que había aproximadamente 15 aficionados de ambos equipos en el que se produjeron empujones y cara a cara entre ambos, sin haber agresiones de mayor índole. Ante esta situación, el colegiado se dirigió al delegado de campo para informarle de que la grada debía ser desalojada para que los enfrentamientos no aumentaran y poder concluir el partido sin mayores incidencias, según refleja el acta oficial del partido a la que ha tenido acceso la SER.
Según explica el colegiado en el acta oficial, ''los oficiales de ambos clubes actuaron de manera correcta y colaboraron en todo conmigo para conseguir controlar la situación. Debido a este suceso el encuentro estuvo detenido por espacio de aproximadamente 5 minutos. Tras la reanudación y hasta el final del partido no hubo ningún otro incidente'', señaló el uniformado.
Además, en la Segunda provincial de infantiles, también hay que reseñar lo ocurrido en el partido entre el Helmántico y la Unión Deportiva Santa Marta. Según reflejó el árbitro en el acta oficial del encuentro, las amenazas por parte de un aficionado del equipo santamartino fueron reiteradas y agresivas. Textualmente, esto anotó el trencilla:
''En el descanso del partido, cuando procedía a abandonar el terreno de juego camino de mi vestuario, un aficionado de la UD Santa Marta C, identificado como tal por las consignas que realizaba a lo largo del partido, se acercó a la valla separadora, visiblemente alterado, y se dirigió a mí a grandes voces en los siguientes términos: “¡Árbitro! ¡Ya está bien! Mira a ver que a mi hijo le están insultando hijo de puta y se han cagado en sus muertos, y sus muertos soy yo, a ver si voy a tener que enfadarme”.
Además de ese episodio vergonzoso, el trencilla también escribió: ''una vez finalizado el encuentro y cuando procedía a abandonar el terreno de juego, este mismo espectador se acercó a la valla de acceso a los vestuarios visiblemente alterado y en actitud inequívocamente violenta, se dirigió a mí diciendo: “¿Qué cojones te pasa a ti con el Santa Marta? ¿De qué vas? Le han dicho de todo a mi hijo, se han cagado en su puta madre y en sus muertos y no has hecho nada, es una puta vergüenza, me da igual que hayamos ganado”, todo esto mientras otros aficionados de su propio equipo trataban de calmarle. De todo lo sucedido fueron testigos directos los jugadores del partido prebenjamín que se disputaba acto seguido''. Ese es el episodio que anotó el árbitro en su documento oficial.
Pero no queda ahí la situación. En la Tercera provincial de alevines, durante el choque entre Pizarrales y Hergar, ocurrió lo siguiente según el acta del encuentro. ''En el minuto 52 de partido un aficionado del conjunto visitante C.D. Munibar Pizarrales "C" saltó la valla perimetral del terreno de juego yéndose hacia el entrenador del conjunto local C.D. Hergar Helmántica "C" de forma alterada y recriminandole uno de sus actos. Dicha persona tuvo que ser detenida por el cuerpo técnico visitante para que no hubiera males mayores. Quedando todo ahí y no ocasionando más problemas a lo largo del periodo de juego que quedaba en el partido'', apuntó el trencilla.
El conjunto de sucesos en los partidos relatados demuestran que el problema social del fútbol base y la agresividad de algunos aficionados, unos pocos entrenadores y ciertos jugadores continúa.
SER Deportivos Salamanca 24 enero 2025
39:32
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